Fue un sabotaje y a punto estuvo de provocar una desgracia. Alguien pinchó una tubería del gas el viernes por la tarde en un inmueble del Centre y generó así un escape que llenó de alarma, policías y bomberos la calle de Sant Josep, la del Passeig y alrededores. Se cortó el tráfico y se creó un cordón de seguridad hasta la reparación.
Un testigo avisó a la Policía Municipal a las 6.20 de la tarde: informaba de una fuga de gas en un edificio de la calle de Sant Josep, entre la del Passeig y la de Sant Pau.
Los agentes locales que acudieron al lugar indicado confirmaron el escape y resolvieron cortar el tráfico y acordonar la zona mientras llegaban los bomberos. Este cuerpo de emergencias envió a dos dotaciones, que revisaron el edificio. Y encontraron una bolsa de gas acumulado a resultas del escape.
Tuvieron que ventilar la planta baja del inmueble. Estaba claro el origen de la fuga: alguien había cortado o pinchado una tubería del gas en la entrada. Se cortó el suministro para atajar la salida del fluido a la espera de una reparación del tubo dañado.
La Policía Municipal informó de la interrupción del tráfico y de la causa de la intervención policial, que no era otra que la acción "de unos desaprensivos". Operarios de una compañía de suministro trabajaron en el arreglo del desaguisado una vez descendieron los niveles de gas acumulado y la zona recuperó la normalidad.