Dos bloques de mármol corrían peligro de desplomarse sobre la calle. Y cayó la rama de un árbol sobre un coche, y vidrios a la acera, y algún que otro poste de la luz. Las rachas de fuerte viento que durante la Semana Santa acompañaron al temporal provocaron decenas de incidencias en Terrassa.
Una de ellas ocurrió el sábado en la Rambla de Francesc Macià. A las 11.30 de la mañana los bomberos fueron requeridos para sanear la fachada de un edificio ante el peligro de desprendimiento de dos bloques de mármol. La Policía Municipal, que llamó a extremar la precaución durante los episodios del vendaval, cortó la rambla.
Minutos antes los bomberos fueron advertidos de una plancha caediza en la calle de la Selva y de una rama de un árbol desplomada sobre un camión en la calle del Infant Martí. El jueves habían retirado una plancha de un balcón en la calle del Periodista Grané. El viernes, otra en la calle Ample.
Estructura de hierro
En la avenida de Joaquim de Sagrera cayó una rama sobre un vehículo. Y en la del Doctor Ullés se desplomó otra. En la carretera de Matadepera se desmontó una estructura de hierro de una obra, y en la Ronda de Ponent, la carretera de Castellar y la calle del Ter cayeron, respectivamente, sendos árboles y un poste de la luz. Voló una pieza de fibrocemento en la calle de Lepant y voló una pérgola en el paseo del Vint-i-dos de Juliol.
Bombers debió sanear inmuebles en la calle de Pitàgores y la de la Emperadriu Eugènia. En la calle del Doctor Calsina se desprendieron vidrios. Hubo más actuaciones de bomberos el domingo, cuando apuntalaron un andamio en la calle de Galileu y retiraron un toldo en la del Periodista Grané.
