Cultura i Espectacles

¿Este vaso de Terrassa hace más antiguos a los cristianos de la Península?

Un tazón de cerámica, datado entre los años 50 y 150, descubierto en nuestra ciudad (en la campaña arqueológica de 1989-1990, en el yacimiento romano de l’Aiguacuit), y que forma parte de los fondos del Museu de Terrassa, podría ser la prueba de que la presencia de comunidades cristianas en Hispania es anterior al siglo III, como se cree y se tiene documentado hasta ahora. La sugerente idea la lanza Antonio Moro, arqueólogo conservador del Museu de Terrassa, en el estudio sobre la pieza que publica en el último número, el 53, de Merlet, el boletín informativo del museo.

Realizado a torno, y restaurado en un treinta por ciento, este vaso tiene en su exterior una decoración seriada "hecha con molde, a base de círculos separados por motivos verticales". Su particularidad responde "a que en su superficie exterior hay dos conjuntos de grafitis, incisos después de la cocción", escribe Moro. "Estos signos son comprensibles en nuestra primera lectura visual, porque parecen letras que se pueden leer e interpretar como un nombre propio".

¿El nombre de su propietario?
Y tras un análisis en profundidad de ellos, a la búsqueda de su identificación y comprensión, Moro señala que en ambos conjuntos -uno en el fondo central exterior del pie del vaso y otros bajo la banda decorativa exterior-, la posible interpretación a su lectura, en una primera instancia, "identificaría ambos textos con el nombre propio de Eva". Puede entenderse que la persona propietaria del vaso debió marcarlo con su nombre, tal como hacemos actualmente para indicar que un objeto es nuestro, o que solo lo utilizamos nosotros.

Y que se llamara Eva "rápidamente nos despierta una serie de preguntas y de reflexiones". Eva es un nombre de origen hebreo (según el libro del Génesis, el de la primera mujer creada por Dios, y significa "aquella que da vida"), después pasado al cristianismo. Pero el tipo de cerámica de la pieza indica que fue elaborada entre los años 50 y 150 (alrededor de los siglos I y II). Y en la provincia romana de la Tarraconense, que llegó a abarcar unas dos terceras partes de la Península Ibérica, y el actual territorio de Catalunya por entero, "aún no se ha constatado una presencia cristiana en esta zona hasta el siglo III". Así pues, "si leemos en ambos textos el nombre propio de Eva en este contexto cronológico que nos aporta el vaso cerámico, la pregunta es obvia: ¿Este nombre propio se puede relacionar con un contexto cristiano? Y en consecuencia, si la respuesta fuera afirmativa, sería preciso revisar el estado actual sobre el conocimiento de la presencia de comunidades cristianas en Hispania".

Pero si fuera negativa, es decir, que hubiera sido realizada aún en un contexto pagano, "¿con que diosa podríamos relacionar este nombre?" Dejando al aire esta pregunta Moro cierra el análisis de una pieza hallada en Terrassa que podría cambiar la cronología de la historia del cristianismo en la Península Ibérica, o al menos plantea dudas sobre ella, y ante la que, reconoce el arqueólogo, "nos resulta imposible dar respuestas claras".

Este número de Merlet también presenta crónicas e informaciones de todas las actividades realizado por el Museu de Terrassa los últimos seis meses. Entre ellas, la exposición temporal de larga duración "Gabinet de col·leccionista", de la que se ha editado un catálogo que puede ser descargado en la web de la institución. También informa de las dos últimas donaciones artísticas al museo. Una comprende doce pinturas y cuatro dibujos de Ramon Cortés Casanovas, cedidos por su hijo, Pere Cortes. La otra son cuatro pinturas y cinco dibujos de Joaquim Vancells i Puig, ha sido efectuada por Michael Allan Vancells y Julia Milton.

Préstamos para exposiciones
La lectura de Merlet permite conocer otras de las muchas actividades del Museu de Terrassa. Entre ellas, los préstamos de piezas que la institución ha realizado para exposiciones: un capitel de pilastra del Teatre Principal para "El Modernisme i les flors" del Museu d’Art de Cerdanyola; dos dibujos de Laureà Barrau para "Cuba, 1898, de colònia a nova república" del Museu de Sant Cugat; el retrato de Paulina Pi de la Serra para Roc Alabern para "Honors i Distincions. Inventari del retrat polític oficial" en el Centre d’Art Maristany de Sant Cugat, y veintisiete obras con temas de masías de Terrassa y Matadepera de Eduard Rosell para la muestra de este artista terrassense que se realizó en Amics de les Arts.

Completan esta entrega de Merlet la relación de las últimas publicaciones llegadas a la biblioteca del Museu de Terrassa, e informaciones generales sobre temas de patrimonio, entre ellos la restauración del Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela.

To Top