El Parlament rindió ayer un homenaje a los republicanos que fueron represaliados por el franquismo, en un acto que este año sirvió también para honrar la figura de Neus Català, última superviviente catalana de los campos de concentración nazis fallecida el sábado a los 103 años. El acto lo presidió Roger Torrent, junto con el presidente de la Asociación pro Inmolados por la Libertad en Catalunya, Pere Fortuny.
Aunque nacida en Els Guiamets (Tarragona), Català residió durante más de dos décadas en Rubí, concretamente en el barrio de Les Torres. Por ese motivo, desde ayer y hasta mañana, las banderas del Ayuntamiento ondean a media asta en señal de duelo. "Su legado seguirá vivo y estaremos en deuda con una persona que supo lo que significa la represión y que vivió para luchar contra ella y mantener viva la memoria de las personas represaliadas", afirmó la alcaldesa de Rubí, Ana María Martínez.
En el acto de ayer en el Parlament, Torrent destacó en su discurso que "hoy, y esta semana especialmente recordando a la luchadora Neus Català, nos toca conjurarnos de nuevo a todos los demócratas, a todos los republicanos, a todos aquellos que estamos convencidos de que la democracia, los derechos y las libertades se defienden siempre". "Haciendo memoria, hacemos presente y sobre todo procuramos construir el futuro", subrayó el presidente del Parlament.
Torrent recordó las palabras de Neus Català cuando "decía que el único olvido que le daba miedo no era un olvido personal, sino el de la memoria: que olvidáramos que habíamos luchado en la defensa de los derechos".
Reconocimientos
El presidente del Parlament alertó de que "hoy vuelven a estar en riesgo muchas de las conquistas sociales conseguidas" y, por ello, "nos toca defender estos derechos democráticamente".
Neus Català, cuyo funeral se oficiará hoy en Móra d’Ebre, fue todo un símbolo de la resistencia contra el totalitarismo por su entereza y capacidad de lucha ante las peores adversidades, además de una firme defensora de los derechos de las mujeres.
Su larga trayectoria personal y su tenaz esfuerzo por la recuperación de la memoria histórica le hicieron merecedora en los últimos años de numerosos homenajes y reconocimientos, como la Creu de Sant Jordi, que le otorgó la Generalitat en 2005, la Medalla de Oro al Mérito Cívico del Ayuntamiento de Barcelona, que recibió en 2014, y la Medalla de Oro de la Generalitat, concedida en 2015.
Por su lado, la consellera de Justicia, Ester Capella, ensalzó la figura de Català como ejemplo de "coraje y compromiso" contra el olvido de la "barbarie" del nazismo y el fascismo. Tras acudir a la capilla ardiente el domingo en Móra d’Ebre, la consellera expresó su "inmensa tristeza" por la muerte de Català y reivindicó su labor para recuperar la memoria histórica, en un momento en el que, alertó, "la extrema derecha vuelve a estar a las puertas de entrar en Las Cortes".
