El miércoles por la tarde la Llibrería Cinta registró un lleno absoluto en el acto de presentación de "El fill de l’italià", la novela de Rafel Nadal que ha ganado la última edición del premio Ramon Llull.
La novela parte de un hecho real: la estancia en Caldes de Malavella de mil marineros italianos durante la Segunda Guerra Mundial.
El autor explicó que conoció la historia "en un club de lectura, con motivo de la presentación de "La maledicció dels Palmisano". Un señor de entre el público me habló de los supervivientes del naufragio en 1943 del Roma -el acorazado más poderoso de la Marina italiana- y me presentó a la persona real que me ha servido de modelo para el personaje de Mateu".
Rafel Nadal conoció también a la familia del personaje italiano y al único superviviente del Roma que todavía vive. Además, la esposa del verdadero Mateu, que en la vida real no se llama así, le dejó leer "doscientas cartas que su marido, entonces novio, le había mandado desde la ‘mili’".
El libro se divide en cuatro partes. En la primera se narra la historia de Mateu, nacido en 1945, hijo ilegítimo de uno de los italianos y de la lavandera del pueblo, que decide emprender la búsqueda de su padre biológico el día del entierro de su madre. En la segunda y la tercera se abordan las peripecias de los marineros y en la tercera la versión de la familia italiana.
Rafel Nadal, que fue director de El Periódico entre 2006 y 2010 y que tiene una larga trayectoria en los medios de comunicación, aseguró que desde que ha cambiado el periodismo por la novela "escribo acerca de las mismas cosas pero ahora lo hago con más calma, espacio y matices. Actualmente necesito 400 páginas y dos años". Se refería a que sus novelas suelen partir de hechos reales. Muchas de ellas están ambientadas durante la posguerra.
"Es una época que nos han explicado muy mal", aseguró, agregando que "si la muestras en color, la posguerra parece menos dura que en blanco y negro". También declaró que "pensar en la guerra me hace pensar en el destino".
Momentos convulsos
El escritor admitió que su larga experiencia como periodista le resulta muy útil para documentarse para sus novelas y contó que mientras recababa información histórica para "El fill de l’italià" había descubierto "cosas muy curiosas" sobre Caldes de Malavella, la población en la que transcurre su novela.
"Por Caldes desfiló la historia más convulsa del siglo XX", aseguró. El escritor explicó que "durante la Guerra Civil se instalaron allí numerosos refugiados, sobre todo vascos, que huían de los bombardeos franquistas y que están enterrados en una fosa común. Después llegaron los judíos que huían de los nazis y que fueron expulsados para acoger, por orden de Franco, a los marineros italianos y, tras el final de la Segunda Guerra Mundial, el pueblo registró la irrupción de cantidad de alemanes, entre ellos 19 criminales de guerra nazis reclamados por los americanos".