Linkedin no es sólo una red social de networking para profesionales, sino una "potente herramienta de hacer negocios" y de empleo siempre y cuando haya una "estrategia" planificada detrás y el usuario sea capaz de mantener "fresca" la relación con sus contactos. Así lo explicó en Cecot Rosaura Alastruey, licenciada en Ciències de la Comunicació y especialista en marketing digital. Alastruey, que fue invitada por el Club Cecot de Marketing i Vendes, es toda una "gurú" en Linkedin y Twitter. Creadora, impulsora y directora de Proyectos TIC, se trata de una profesional que fue pionera en la introducción del networking profesional en España.
La sesión, que llenó la sala Magna de Cecot, constó de tres partes: una introducción donde se habló de Linkedin en cifras, un apartado de trucos para optimizar el perfil profesional y también recomendaciones para extraer el mayor rendimiento a esta red. La presentación del acto corrió a cargo de Valentí Clotet, presidente del citado club.
Linkedin posee 610 millones de usuarios en todo el mundo y da acceso a doscientos países. En España, son once millones, una de las tasas más altas, aunque también de las que "menos provecho saca" a la red", dijo Alastruey. En la provincia de Barcelona, el número queda en 1,2 millones y en Terrassa existen casi cuarenta mil (39.728 exactamente). Además, desde hace un año y medio la red ha dado un salto importante en España: el 40% de usuarios se conectan. "Son las páginas amarillas del siglo XXI", dijo esta experta, que añadió que Linkedin "ha abierto las puertas para contactar con mucha gente, que antes no era tan fácil. Porque ahí estaba el filtro de las secretarias. Ahora, se puede ir directamente, pero el problema es que vendemos muy mal". En el fondo, comentó en tono irónico, el asunto va de "enamorar", es decir, seducir a tus contactos. Porque, en el caso de que el usuario busque empleo, ¿De qué sirven los contactos si no se acuerdan de uno?, se preguntó.
No se trata, por lo tanto, de tener muchísimas relaciones dadas de alta (ella dispone, por ejemplo, de 21 mil), sino de perfilar una estrategia de "mantenimiento" porque, en el fondo, "lo difícil no es hacer el contacto; lo básico es la estrategia". Desde que se establece una relación hasta que surge alguna oportunidad de empleo o de negocio suele transcurrir alrededor de un año. Pero esa posibilidad no surge por casualidad ("no existe el Linkedin milagroso") sino porque ha habido un trabajo previo de mensajes o aportaciones, como mínimo cada mes y medio. "Excusas, en definitiva, para que la persona te mantenga fresca en la mente". Para ello, otra estrategia a seguir es clasificar la base entre "contactos fuertes y débiles". Teniendo al día este arduo trabajo, se preguntó Alastruey, "¿No sé si hay alguien capaz de tener treinta mil usuarios?
Tener muy claro el objetivo
Además de tener el perfil perfectamente editado ("los incompletos o sin foto, no sirven para nada), el usuario de Lindkedin debe tener muy claro su objetivo en la red. No valen las aspiraciones genéricas (tipo "ampliar relaciones con empresas del tal sector…."), sino que el fin debe ser "realista, medible, específico, acotado en el tiempo y posible". Es decir, concretar al máximo ese objetivo. Por ejemplo, contactar con cinco clientes de un sector específico, en un determinado territorio y continuar así hasta el máximo nivel de precisión posible. E hilar esa red de contactos con una premisa que es muy importante; "hacerlo bastante tiempo antes de que se vaya a necesitar" . Alastruey también aconsejó a los participantes en la sesión que no restringieran sus contactos exclusivamente a su ámbito profesional.