El conseller de Territorio de la Generalitat, Damià Calvet, planteó el lunes la necesidad de desdoblar la línea vallesana de Ferrocarrils construyendo un segundo túnel ferroviario que una Barcelona con los municipios del Vallès Occidental. Lo anunció durante la presentación de la estrategia de Ferrocarrils de la Generalitat hasta el año 2030.
El desdoblamiento de la vía es la clave de vuelta para que la línea vallesana de FGC reduzca el tiempo de trayecto y sea realmente competitiva con el vehículo privado. El segundo túnel permitiría realizar el recorrido entre Terrassa o Sabadell y Barcelona en menos de media hora, dijo Calvet, frente a los 40 minutos actuales. El desdoblamiento permitirá además duplicar la oferta de plazas.
Uno de los objetivos de la mejora es que el tren le gane usuarios al coche descongestionando la autopista C-58, que padece colapsos diarios. La incorporación del tercer carril a algunos tramos de la infraestructura -ahora en ejecución- pretende aumentar la capacidad de la vía, pero no garantiza la fluidez. Además, con la puesta en marcha del tramo Terrassa/Olesa de la B-40 se espera que la C-58 registre un incremento notable del flujo de vehículos.
No da más de si
El conseller Calvet ha asegurado que el nuevo túnel de la línea Barcelona-Vallès de FGC es necesario porque la infraestructura actual "no da más de sí". En este momento pasa un tren cada 120 segundos. El segundo túnel permitiría incorporar trenes a distintas velocidades y combinar los trayectos con parada en todas las estaciones con trenes lanzadera. Con una sola vía, la convivencia de ambos es inviable.
Calvet se muestra confiado en que en 2020 su departamento cuente con un "un estudio informativo" del proyecto, aunque no ha querido especular con cuándo podría entrar en servicio el nuevo túnel. La iniciativa está ahora en manos de la Autoritat del Transport Metropolità (ATM), que debe decidir si incorpora el proyecto a su plan director de infraestructuras 2030.
Ferrocarrils de la Generalitat lleva años apostando por la línea Barcelona Vallès. La prolongación de la S1 (Terrassa) y la S2 (Sabadell), ha comportado un incremento importante de viajeros y provocado situaciones de saturación en horas punta. Después de la crisis, los incrementos de viajeros han superado el 3 por ciento anual.
En Terrasa el aumento de usuarios es constante desde que en 2015 se entrenó la prolongación hasta Can Roca. En respuesta a esa demanda, durante 2017 todos los trenes de la línea vallesana de FGC pasaron de tres a 4 vagones, ampliando un 33 por ciento su capacidad.
La compañía no ha dejado de explorar medidas para aumentar la capacidad y el confort de los viajes, especialmente en horas punta. Una de las últimas fue la incorporación de barras verticales en los pasillos, lo que ha propiciado que los viajeros no se concentren junto a las puertas, bloqueando el acceso al interior del vagón. Con esta medida, en hora punta los trenes alcanzan un 90% de su ocupación.
