Olesa inaugura este domingo las representaciones teatrales de “La Passió” con muchas novedades. El drama sacro se estrena con una apuesta por la fuerza de la música y los efectos de luz en el espectáculo. Además, este año el teatro abre nuevos espacios para personas con movilidad reducida, para hacerlos más cómoda la asistencia a la representación. Con el empuje de más 480 años de historia y el esfuerzo de casi un millar de personas, La Passió d’Olesa se mantiene firme como una de las tradiciones culturales más importantes de Catalunya.
Durante toda la pretemporada el equipo de dirección escénica ha trabajado en la tarea conjunta de interpretación y técnicos. En muchas escenas la actuación de actores y actrices va estrechamente ligada a la luz y la música -una composición del maestro Josep M. y está interpretada por la Orquestra Simfònica del Vallès y el Coro Madrigal, dirigidos por Salvador Brotons-. Por este motivo, se persigue que los actores saquen todo el zumo a la banda sonora y a la iluminación para potenciar la emoción del público.
En cuanto a las instalaciones, el teatro estrenará esta temporada una zona especial en el patio de butacas adaptada para sillas de ruedas, para facilitar el acceso a las personas con problemas de movilidad.
El día 24 de marzo, como novedad, tendrá lugar por primera vez el “Día del espectador” con el objetivo de abrir el espectáculo al máximo de gente, tal como ya hacen otras disciplinas artísticas como el cine.
La temporada 2019 de “La Passió” de Olesa de Montserrat contará con diez representaciones, del 3 de marzo al 1 de mayo. La obra está subtitulada en castellano e inglés en todas las representaciones. Por otro lado, Ignasi Aballí es el autor del cartel de esta edición.
