El programa Reempresa, que pone en contacto a emprendedores con empresarios que cesan en la actividad, ha conseguido salvar 141 comercios y pymes (casi cuarenta corresponden al pasado 2018) en Terrassa desde el año 2013 y un total de 306 puestos de trabajo. Estas operaciones han conllevado una inversión inducida de 5,4 millones de euros. A nivel catalán, se han contabilizado casi dos mil casos de éxito desde el inicio de la actividad en 2011. De ellos, alrededor de quinientos se registraron el año pasado. Así se puso de manifiesto ayer en el acto de balance de Reempresa de Catalunya, programa fruto del convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Terrassa, la Diputació de Barcelona y el Centre de Reempresa de Catalunya. Este proyecto, que se ha convertido en un auténtico mercado de segunda mano de pymes en Catalunya, y ha recibido numerosos reconocimientos, surgió en 2011 a raíz de una iniciativa de la patronal egarense Cecot y Autocupació y se ha desarrollado y extendido gracias a la colaboración pública y privada.
“No podemos dejar perder el tejido empresarial que se ha formado durante generaciones y que tanto ha costado construir. Ahora, tenemos una herramienta para impedirlo y que funciona realmente”, dijo Alfredo Vega, alcalde de Terrassa, durante el acto. Vega estuvo acompañado por Rosa Serra, coordinadora del Àrea de Desenvolupament Econòmic Local de la Diputació de Barcelona, y Antoni Abad y Albert Colomer, presidente y director, respectivamente, del Centre de Reempresa.
Con la Diputació
Desde que la Diputació de Barcelona colabora con el programa de Reempresa (desde el año 2012) se han producido 901 casos de éxito de traspasos de pymes en la provincia y se han salvado 2.351 puestos de trabajo. Estas operaciones han supuesto una inversión inducida de cuarenta millones de euros. “Es un programa de éxito y de resultados inmediatos”, destacó Antoni Abad, presidente de Cecot, y que da respuesta a aquellos empresarios y comerciantes que aspiran a que el negocio que dejan, que en parte de los casos han regentado durante largos periodos, queden en manos de profesionales que, además, reciben asesoramiento para darle continuidad. Abad comentó que se ha creado un mercado “multisectorial”, donde se traspasan empresas de muy diversos ámbitos, “desde una panadería a una discoteca pasando por un taller”. “Hay más emprendedores que cedentes y este es un dato muy relevante que nos debería dar confianza”. Rosa Serra, por su parte, destacó el carácter “innovador” del programa que aportó una “ilusión que necesitábamos” cuando la Diputació empezó a colaborar con Reempresa “en plena crisis” y hace evidente el buen resultado de “una nueva línea de colaboración público y privado”. Por su parte, Albert Colomer, director de Reempresa, destacó que el 87% de empresas que han cambiado de manos continúan en funcionamiento al cabo de 3/5 años, y de ellas, un 5% ha vuelto a ser vendida.