El próximo 12 de febrero es la fecha en la que definitivamente se iniciará el juicio por el "procés" independentista. El Tribunal Supremo fijó ayer el comienzo para este día, una semana más tarde del plazo previsto inicialmente. La confirmación coincidió con el traslado de los políticos presos desde centros penitenciarios catalanes a prisiones madrileñas. El terrassense Josep Rull y otros ex miembros del Govern de la Generalitat y líderes del "procés" que serán juzgados desde el día 12 ya han pasado la primera noche en Madrid. Junto a Rull se sentarán en el banquillo Oriol Junqueras, Raül Romeva, Jordi Turull, Joaquim Forn, Dolors Bassa, Santi Vila, Carles Mundó y Meritxell Borràs-, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell, el expresidente de la ANC y líder de JxCat Jordi Sànchez y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.
El traslado se efectuó ayer con un gran despliegue de efectivos policiales desde las prisiones hasta Brians, que fue el punto de partida hacia Madrid. La operación no estuvo al margen de protestas. Centenares de personas se concentraron a primeras horas de la mañana en las prisiones para dar apoyo a los presos políticos y se registraron incidentes.
La Sala que enjuiciará los hechos tenía previsto iniciar la vista el día 5 pero las dilaciones con el auto de admisión de prueba lo han retrasado una semana más, aunque había magistrados partidarios de comenzar el juicio la próxima semana. De esta forma habrá 11 días entre el señalamiento y el inicio del juicio, después de que las defensas de Oriol Junqueras, Raül Romeva y Jordi Cuixart pidieran que hubiera un margen de tiempo suficiente para preparar su estrategia y evitar la "indefensión".
La Fiscalía pide penas de entre 7 y 25 años de prisión por los delitos de rebelión, malversación y desobediencia, mientras que la Abogacía rebaja la horquilla a entre 7 y 12 años de cárcel, al acusar por sedición y no por rebelión, además de los otros delitos.
Junqueras, el primero
Así, la vista oral arrancará el martes 12 de febrero con las denominadas cuestiones previas que podrían alargarse tres días y acaparar la primera semana puesto que el juicio se celebrará en sesiones de mañana y tarde de martes a jueves, para evitar a los presos los trasiegos de idas y venidas permanentes ya que tardarán una hora aproximadamente en llegar desde las prisiones de Madrid. De esta forma no sería hasta la tercera semana de febrero cuando den comienzo los interrogatorios a los 12 acusados, con Oriol Junqueras en primer lugar.
El Tribunal Supremo garantizará que los nueve líderes soberanistas en prisión serán tratados en el juicio con la "máxima dignidad y respeto", para evitar que no sufran "ningún componente de penosidad" ni "exposición que les genere la más mínima incomodidad" tanto en los trayectos como en el edificio.
El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy y su exvicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría encabezan la larga lista de testigos del juicio del "procés", entre los que también están el vicepresidente del Govern, Pere Aragonés; el presidente del Parlament, Roger Torrent; el expresident Artur Mas y el lehendakari Íñigo Urkullu.
Los nueve presos soberanistas, que han sido trasladados este viernes a centros penitenciarios de Madrid, han afirmado a través de las redes sociales que durante el juicio al que se enfrentan en el Tribunal Supremo defenderán "los derechos y libertades fundamentales".
Rull, emocionado
Refiriéndose a las muestras de apoyo ciudadanas hacia los presos, el exconseller el terrassense Josep Rull destacó en un tuit: "Os hemos visto, os hemos sentido y nos hemos emocionado. ¡Vuestra fuerza es nuestra fuerza! ¡Vuestra dignidad es nuestra dignidad!".
En su cuenta de Twitter, el exconseller Jordi Turull señaló también que "estamos infinitamente agradecidos por tanto apoyo" y añadió: "Ahora nos toca a nosotros que durante el juicio no os sintáis solos en la defensa de los derechos y libertades". El exconseller Joaquim Forn, antes de partir hacia la cárcel madrileña de Soto del Real, agradeció también por el mismo canal todas las muestras de apoyo y mostró su determinación "en la defensa de la libertad, la democracia y la justicia" durante el juicio en el Supremo.
Pocas horas antes de iniciarse el traslado, el exconseller Raül Romeva indicó en un tuit: "Marchamos hacia Madrid, pero no vamos a defendernos. Vamos a reivindicar la democracia y el pacifismo". "Que no nos esperen derrotados. ¡Adelante!", exclamó Romeva.
La expresidenta del Parlament Carme Forcadell dio las gracias "a todas y todos los que estos meses" se han acercado a la prisión de Mas d’Enric para expresarle su apoyo: "Volvemos a Madrid con vuestro calor, la cabeza bien alta y cargadas de determinación para desmontar todas y cada una de las mentiras de este proceso judicial".
El expresidente de la ANC Jordi Sànchez hizo un llamamiento de cara al proceso judicial de las próximas semanas: "Volquémonos en exigir la absolución y en denunciar este juicio. Hagámoslo de la misma manera que durante meses nos volcamos en preparar el 1 de octubre".
En defensa de la democracia
Por su parte, la exconsellera Dolors Bassa quiso igualmente lanzar un último mensaje antes de su traslado a Alcalá-Meco: " Voy hacia el juicio firme y segura para defender la democracia y la justicia".
El presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, escribió en un tuit: "472 días de prisión y ninguna renuncia. Marchamos hacia Madrid para acusar al Estado de vulnerar los derechos civiles y políticos del pueblo de Cataluña, por defender nuestro legítimo derecho a la autodeterminación y a la desobediencia civil". La Guardia Civil inició poco antes de las 9:30 horas el traslado de los nueve líderes independentistas presos desde el centro barcelonés de Brians 2 hacia Madrid, donde permanecerán en las cárceles de Soto del Real, los hombres, y Alcalá Meco, las mujeres, mientras dure el juicio del procés en el Supremo.
Los nueve presos fueron trasladados en un autobús de la Guardia Civil, que, escoltado por furgones de los Mossos d’Esquadra, partió de Brians entre los gritos de "libertad" de los concentrados en las movilizaciones convocadas por las entidades soberanistas a las puertas del centro penitenciario y en las carreteras cercanas.
Protestas
El traslado se inició poco antes de las seis de la mañana de ayer, cuando los nueve internos empezaron a ser conducidos por los Mossos a Brians 2 -centro de enlace de los servicios penitenciarios de la Generalitat y el Ministerio de Interior. Centenares de personas se concentraron desde la madrugada a las puertas de estas prisiones, convocadas por las entidades ANC y Òmnium Cultural para despedir y expresar su apoyo a los políticos presos en su viaje a Madrid.
En la salida de Carme Forcadell de la cárcel de Mas d’Enric, un manifestante resultó herido cuando los Mossos intervinieron para desalojar a un grupo de personas que se había concentrado en la carretera para impedir el paso de los furgones policiales. También se concentraron numerosos manifestantes a las puertas del centro de Brians 2, donde los políticos presos permanecieron cerca de hora y media a la espera de partir rumbo de Madrid.