Blue Monday. Este es el nombre con el que se califica este pretendido fatídico tercer lunes del mes de enero. Su creador, el investigador Cliff Arnal, determinó esta fecha en función de diferentes elementos y variables, como el recuerdo de la reciente celebración de la Navidad y las deudas adquiridas en ese período, el clima, el salario percibido, los propósitos para el nuevo año y su no aplicación y el nivel de motivación y el sentimiento de la necesidad de tomar medidas ante este incumplimiento.
Esta iniciativa, como no podía ser de otra manera, también la han acogido algunos sectores, que aprovechan este nuevo concepto para ofrecer sus productos o sus servicios con el fin de que los clientes puedan superar los pretendidos efectos negativos de esta fecha. De hecho, su primera aparición, en el año 2005, fue en una campaña publicitaria de una gencia de viajes.
A otras costumbres que provienen de fuera, como Halloween o el ya intocable Black Friday, se une ahora este Blue Monday, que no cuenta, precisamente, con la aprobación del mundo científico.
Marta Ferran Vives
Maestra, 34 años
Creo que es un poco una estafa. No influye si es el tercer lunes de enero en que la gente tenga que estar triste. Seguramente hay empresas que lo aprovechan para hacer su negocio y hacen ofertas para estos días. Pienso que nos están llegando muchas costumbres de estas, como el Black Friday y otras, y nos acabaremos cansando de todo esto.
Edurne Vaca Aramendi
Economista, 40 años
Ahora parece que hay una necesidad de etiquetarlo todo un poco y dar nombre a las cosas por cuestiones de márketing o por motivos que no sabemos. A mi no me había llegado todavía y no tenía información sobre esto del Blue Monday. Supongo que hay quien sabe aprovecharse de ello. Aunque dicen que lo han sacado de un estudio, todo es relativo y los estudios, me parece, acaban diciendo lo que les interesa que digan a los que los hacen.
Fuensanta Segura Márquez
Vendedora, 61 años
No sé mucho de qué va esto del Blue Monday pero suena a otra estrategia comercial para vender. El lunes es el día que acostumbra a gustar menos de siempre, porque se acaba el fin de semana, pero no creo que no sea más triste que el otro ni que el enero sea todo triste.
Francisca Herrera
Jubilada, 69 años
Me parece que estamos exagerando y estamos importando las cosas de fuera, que ante nadie las quería, y ahora todo el mundo quiere las cosas de fuera, de América o de otros sitios. Y aquí ya tenemos nuestras costumbres. Veo que es una cosa más para la juventud. Los jubilados estas cosas ya no nos interesan demasiado y tenemos otro tipo de vida diferente.
Gerard Petit Esteban
Estudiante, 20 años
No lo conozco mucho pero, en mi opinión, esto es una moda pasajera y creo que sólo sirve para que algunas empresas se beneficien. Es claramente un tema de márketing y, la verdad, lo encuentro una vergüenza. Creo que nos estamos pasando con todo esto del Black Friday o el Blue Monday. Lo que me parece que todo está pensado para hacer negocio.
Esther Masana Soley
Administrativa, 39 años
Creo que esto del Blue Monday es un poco una manera de facilitar el consumismo, como pasa con el Black Friday, y que la gente gaste en una época concreta. No sé si funcionan mucho estas cosas pero lo que sí tengo claro es que yo no participo. No sé mucho la historia del Blue Monday pero tampoco me llama la atención. Por las redes sociales lo he visto y lo que considero es que incita al consumismo.
Quim sánchez galobardes
Panadero, 40 años
Esto es consumismo puro. En todo esto del Black Friday o el Blue Monday creo cero y me parece que es una forma que tienen las empresas de vender más. Y ni creo ni participo. Aquí tenemos nuestras costumbres y estamos importando demasiado y nos estamos dejando llevar por las grandes empresas. El pequeño comercio lo sufre, porque no puede llegar al ritmo de estas grandes empresas. Ahora se hacen rebajas todo el año y llega un momento en que no sabes en lo que te hacen un descuento.
Pili Balllbè Sala
Administrativa, 42 años
No creo en los tópicos ni en estas cosas. El enero es un mes duro para todos, y es lo que llamamos la cuesta de enero. Vemos al enero como un mes muy largo, después de las fiestas de Navidad, y, junto a febrero, son los meses más tristes y cuestan más de pasar, hasta que llega el Carnaval. Enero cuesta de pasar porque la Navidad es alegría, familia…
Pau Martí Vicente
Entrenador de fútbol, 35 años
No controlo mucho este concepto, pero se está llegando a un punto en que las compras son globales y puedes comprar por internet cualquier cosa y se han de inventar estas cosas para fomentar las comprar en la calle. No lo conocía. Para mi, el mes de enero no es triste porque empieza el año con una actitud positiva y con ganas de cambiar las cosas que crees que no has hecho bien.
Albert Domper Pueyo
Jubilado, 65 años
Personalmente, me parece una tontería. El lunes, conceptualmente, es un día malo pero esto nos lo ha impuesto la cultura inglesa. El mes de enero sí que se considera malo pero no creo en estos días señalados como norma. Otros que son tradicionales sí, pero estos son para hacer negocio.
Dani Tenza Céspedes
Estudiante, 19 años
Sí que he oido hablar del Blue Monday pero no conozco el motivo de su existencia. Pero, de todos modos, no me interesa mucho. Posiblemente se ponen estos días para vender más y hacer ofertas en los comercios. No veo, por eso, que se haya implantado mucho.
Josep Arjona Torres
Jubilado, 65 años
Supongo que esto depende de cada persona y de su forma de ser. Si la persona es alegre, le da igual el día que sea, domingo o lunes. Esto va en la persona y en la actitud. Tampoco importa si es enero u otro mes.No hay que hacer caso al márketing de estas empresas que lo que quieren es vender más. Lo importante es ser feliz cada día.