Los jóvenes santcugatenses Sergi Porteros y Adrià Sanjuan se encuentran entre los cuatro montañistas fallecidos el domingo en un accidente en los Andes de Perú. Las otras dos víctimas son el vecino de Cerdanyola Gerard Borrull y el guía que iba con la expedición catalana, el peruano Rubén Darío Alva. Hubo un único superviviente, Pablo Belmonte, también vecino de Cerdanyola, que fue quien dio aviso a los equipos de emergencia.
La desgracia se produjo el pasado domingo, cuando los excursionistas se disponían a bajar tras coronar la cima del pico Nevado Mateo, a cinco mil metros de altura, en la región de Áncash. Al iniciar el descenso, el grupo fue sorprendido por un alud y, al parecer, uno de los alpinistas resbaló y arrastró a los demás al ir atados con una cuerda.
La Asociación de Guías de Montaña del Perú explicó en un comunicado que la avalancha arrastró los cuerpos aproximadamente unos 200 metros y se presume que el accidente ocurrió alrededor del mediodía del domingo. Un equipo de la Unidad de Salvamento y de la Asociación de Guías de Montaña localizó los cuerpos durante la noche del domingo y aunque el guía peruano estaba aún con vida, murió minutos después debido a sus lesiones.
Sergi Porteros era exjugador del Handbol Sant Cugat y del Handbol Valldoreix, exmiembro de los Castellers de Sant Cugat y antiguo alumno de la Escola Avenç. Adrià Sanjuan, por su lado, había nacido en Cerdanyola, aunque residía en Sant Cugat desde 2006 y también había estudiado en la Escola Avenç.
Repatriación
La tercera víctima vallesana, Gerard Borrull, era del barrio de Serraparera de Cerdanyola, al igual que el superviviente, Pablo Belmonte, quien ayer continuaba en una clínica de la ciudad de Huaraz tras ser ingresado el domingo.
Después de ser rescatados, los cuerpos de los fallecidos fueron trasladados a la morgue del Ministerio Público de la ciudad de Huaraz, capital de la región norteña de Áncash y situada a más de 400 kilómetros al norte de Lima, informaron ayer fuentes oficiales. Según la información brindada en el lugar por fuentes policiales y familiares de las víctimas, las autoridades tenían previsto realizar ayer los trámites para la repatriación de los cuerpos.
El presidente de la Asociación de Guías de Montaña del Perú, Rafael Figueroa, declaró que el guía peruano fallecido tenía 12 años de experiencia en montañismo. “El problema es que ahora los glaciares tienen muchas alteraciones por el cambio climático. Antes era más seguro escalar y ahora hay un cambio que sorprende a los guías de montaña”, declaró a medios peruanos.
Los ayuntamientos de Sant Cugat y Cerdanyola convocaron ayer al mediodía cinco minutos de silencio a las puertas de sus consistorios en señal de condolencia y decretaron un día de luto con banderas a media asta (ver recuadro).
El presidente del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, y del Govern, Quim Torra, trasladaron a los familiares de las víctimas su pésame y su apoyo con sendos mensajes a través de Twitter.
El Nevado Mateo está en la Cordillera Blanca, una cadena de montañas de los Andes centrales cubierta de nieve y una de las zonas predilectas de los montañeros para hacer ascensos a sus picos y practicar deportes de aventura.