Raimon Escudé i Pladellorens falleció el pasado viernes a la edad de 84 años. Su marcha, en plenas fechas navideñas, ha supuesto un duro golpe para la familia, para sus allegados y para la clase política, que los últimos días ha inundado las redes sociales de muestras de apoyo y condolencia.
Licenciado en derecho, fue elegido en 1987 concejal del Ayuntamiento de Terrassa por Convergència i Unió, coalición de la que fue portavoz municipal hasta el año 1991. Durante ese periodo, Escudé jugó un papel clave como artífice de la transición democrática en la ciudad junto al alcalde socialista Manuel Royes y otros políticos destacados del momento como Jordi Labòria (PSC) y Roc Fuentes (PSUC).
Brillante y afilado orador, Raimon Escudé fue diputado en el Parlament de Catalunya durante cinco legislaturas (1980,1984, 1988,1992 y 1995). En este último año ocupó además la secretaría primera de la Cámara catalana.
El político inició su militancia en Unió Democràtica en 1953 y, veinticuatro años más tarde, en 1977, ingresó en Convergència Democràtica de Catalunya. Hombre de fuertes convicciones soberanistas, en el año 2000 participó en la organización del Fòrum Català pel Dret a l’Autodeterminació y dos años más tarde se incorporó como militante de base a ERC.
A lo largo de su dilatada trayectoria política y social, Raimon Escudé también fue secretario general del Institut Industrial, de la Fundació Abat Marcet y presidente de la delegación egarense de Òmnium Cultural entre los años 1976 y 1980.
Durante toda su vida fue un apasionado de la política y también de la literatura. En su biblioteca privada, el exconcejal poseía un extenso fondo bibliográfico en el que destaca una colección diez mil ejemplares de novela policíaca escrita en distintos idiomas.
El pasado domingo familiares, amigos y allegados despidieron a Raimon Escudé en una emotiva ceremonia en el Sant Esperit.