"Tapaos bien, no os vayáis a resfriar. Sólo faltaría que tuvieseis que ir al médico", advirtió la portadora del megáfono antes del comienzo de la manifestación que ayer por la tarde recorrió el Centre. El comentario parecía acertado a tenor de la "grave situación sanitaria existente en Terrassa" que denunciaron los convocantes de la "Jornada de lucha por la sanidad pública". Cientos de personas participaron en una nueva marea blanca que se inició frente al hospital Mútua y terminó en el Raval de Montserrat.
La protesta, la enésima en lo que llevamos de año, empezó en la plaza del Doctor Robert, frente al hospital universitario MútuaTerrassa. "La salud no es un negocio. Las listas de espera matan", rezaba la pancarta que encabezó la marcha hasta el Raval de Montserrat. Antes se leyó el manifiesto elaborado para la ocasión. El que denuncia la situación sanitaria de gravedad en Terrassa y su área de influencia, "que afecta a la salud de unos 400.000 conciudadanos". El manifiesto que considera "un insulto a la inteligencia colectiva" orillar que estén en lista de espera las personas que aguardan desde su casa conocer día y hora para ser atendidas. El que subraya que pese al maquillaje de cifras los datos oficiales ponen de relieve "la grave e injusta situación de déficit de atención sanitaria" en la demarcación, sobre todo en lo que respecta a Mútua.
Los días de espera para hacerse un TAC son 147 en Mútua, treinta en el Consorci Sanitari de Terrassa (CST) y 52 en la media de Catalunya, según la Plataforma en Defensa de la Sanitat Pública de Terrassa-Marea Blanca. Los números son, respectivamente, 142, 72 y 68 en las resonancias magnéticas; 110, 33 y 65 en ecografías abdominales; 129, 52 y 77 en cardiología; 247, 52 y 73 en cirugía general. Esos son algunos ejemplos, según los convocantes de la marcha, que avalan las críticas a Mútua, uno de los objetivos de la jornada de ayer.
Colapso
La Marea Blanca afirma que el "infrafinanciado CST", de titularidad pública, mantiene en general un tiempo de espera similar al de la media catalana. Mútua, de titularidad privada, no: triplica y más ese tiempo "en muchísimos casos". Sólo hay un beneficiario directo del crecimiento de las listas: "La sanidad privada y las empresas de seguros, que desde el año 2010 han aumentado su actividad en Terrassa entre un 5 y un 30 por ciento".
En nuestra ciudad "se incumple sistemáticamente" el tiempo para ser atendido por un médico de cabecera, estipulado por la Generalitat en 48 horas. La situación, añade la plataforma, contribuye "a mantener colapsados los servicios de urgencias" de hospitales. La sobrecarga asistencial es "vergonzante, indigna y peligrosa" para los pacientes, pero también para los profesionales sanitarios.
Los planes de choque presupuestarios deben consolidarse para revertir los recortes. La plataforma exige que "se dejen de maquillar las cifras" y que a aquellos que no dispongan de día y hora también se les considere en las listas de espera. Hay que potenciar la atención primaria, según los organizadores de la manifestación, que exigieron la apertura de un CAP "las veinticuatro horas del día". Para la Marea Blanca es necesario que la Generalitat contrate a un interventor para controlar la gestión de Mútua.
