De los seis vagones que conformaban el tren que descarriló el martes en Vacarisses a causa de un desprendimiento de tierras, ayer sólo quedaba uno en el lugar del accidente, que está siendo desguazado allí mismo. Los cinco restantes ya se encuentran en la estación de Sant Vicenç de Castellet, donde algunos serán reparados y otros despiezados, informaron ayer fuentes de Renfe. El convoy que está siendo desmantelado en el mismo lugar del siniestro es el que impactó de lleno contra la tierra y las rocas caídas a la vía. Ahora, personal de Adif se dedica a la reparación de la infraestructura ferroviaria, que ha quedado seriamente dañada, añadieron las mismas fuentes, que no precisaron cuándo se volverá a abrir el tramo de la línea R4 de Rodalies que cubre el trayecto Terrassa-Manresa. El restablecimiento del servicio dependerá, en todo caso, de la evolución de los trabajos de reparación.
Mientras tanto, seguirá funcionando el dispositivo de buses habilitado por la compañía ferroviaria para trasladar a los pasajeros -aproximadamente unos cuatro mil diarios- de todas las estaciones afectadas que hay entre Terrassa y Manresa, que son, además de las de estos dos municipios, las de Viladecavalls (dos), Vacarisses (dos), Castellbell i el Vilar y Monistrol (una para ambos) y Sant Vicenç de Castellet (una).
El dispositivo especial de buses habilitado por Renfe entre Terrassa y Manresa esta formado por 15 vehículos y 20 personas que informan y atienden a los pasajeros, y que están distribuidas por las estaciones afectadas.
Asimismo, de los cinco heridos con pronóstico menos grave que ingresaron en centros sanitarios, cuatro de ellos seguían ayer hospitalizados: uno en Althaia Manresa y tres en mutuas laborales.
Inversiones
Por otro lado, el conseller de Territori i Sostenibilitat, Damià Calvet, indicó ayer que ve "imposible" que se pueda prestar el servicio de tren de Rodalies "de forma correcta" sin la inversión del traspaso que se firmó hace diez años, de cuatro mil millones de euros. Explicó que el traspaso está "incompleto e incumplido" y denunció que, de los cuatro mil millones de inversiones en infraestructuras, solo se ha ejecutado aproximadamente un 13%.
"El desfase entre lo prometido y lo cumplido era tan grande que, en 2013, se pactó otra cifra de 306 millones, de los que solo un 12% se han ejecutado", lamentó el conseller y exprimer teniente de alcalde de Sant Cugat.
La Generalitat ha puesto ahora sobre la mesa la reapertura del traspaso y el supuesto déficit de inversión después del accidente del martes, que causó un fallecido y casi medio centenar de heridos.
Acerca de los incumplimientos en las inversiones pactadas, Calvet aseguró que serán "exigentes" y que ya trabajan para establecer los mínimos de cumplimiento que deben materializarse durante los próximas semanas en una reunión con el Ministerio de Fomento.
Sobre el servicio de transporte entre Manresa y Terrassa -el tramo de la línea R4 afectado tras el desprendimiento de tierras-, el conseller recordó que se realiza en autobús hasta que se restablezca el paso de trenes. "Las obras y actuaciones para restablecer el servicio lo antes posible están efectuándose a buen ritmo", indicó el conseller de Territori i Sostenibilitat.