Como los más ansiosos en algunas bodas, algunos comensales que acudieron el lunes al Palau de Congressos de Catalunya, en Barcelona, para asistir a la entrega de los premios Planeta, se llevaron a casa los centros de mesa. Y los centros de mesa, preparados por Fupar, estaban compuestos, también, de libros viejos. La fundación egarense, que atiende y ocupa a discapacitados intelectuales, ha solicitado la devolución de los libros, prestados por una librería de Barcelona.
Fue un tuit de una comensal, escritora, la que activó el reguero de informaciones sobre el particular en la red social. Refería la usuaria que estaban rapiñando, tal cual, los centros de mesa, entre los que figuraban "obras maestras" tales que un ejemplar de "La esfinge maragata", de Concha Espina o un libro de Erasmo en lengua francesa. Había en una mesa una obra del teólogo y filósofo Jaime Balmes.
La confesión de la tuitera recibió la respuesta de la fundación en otro mensaje: "Estos centros de mesa han sido elaborados por nuestra fundación gracias al convenio de alquiler con una librería especializada en libro antiguo. Agradecemos cualquier gesto en la recuperación de los ejemplares desaparecidos durante la gala".
Llamamiento
La tuitera dijo creer que los libros habían sido adquiridos a peso y que acabarían en la basura. Le hacía gracia rescatarlos. Se prestó a colaborar, preguntó dónde devolver los libros y llamó al resto de la gente a hacer lo mismo. Los libros son de una tienda del Eixample.
En las mesas había dispuestos unos quinientos libros. No desaparecieron todos. Hace siete años que Planeta confía a Fupar la decoración de las mesas de su gala. Nunca había pasado nada semejante a lo del lunes, destacó ayer un responsable de la fundación.
