Roser se traba al pronunciar "sintetizador" -"palabra terrible", nos dice- y la anécdota es reveladora de que Els Catarres son unos recién llegados a los territorios musicales de la electrónica. Pero el rápido despegue de "Tots els meus principis", el disco con el que este grupo inicialmente de pop-folk ha dado un giro a su estilo, señala que la exploración ha encontrado terreno firme y buenos frutos, y augura nuevos descubrimientos en estos caminos. Roser, Èric y Jan, Els Catarres, estuvieron recientemente en Terrassa y nos comentan este cuarto álbum de su trayectoria.
¿Como surgió esta inesperada electrificación de Els Catarres?
No había una idea previa de lo que queeríamos hacer. Solo que electrificábamos una parte del grupo. Roser pasaba del contrabajo al bajo eléctrico, Joan cogía la guitarra eléctrica, y añadíamos teclados y sintetizadores. Y fuimos experimentando. Tuvimos más tiempo para hacer este disco que los anteriores, y íbamos probando cosas. Hay canciones que se han quedado con el espíritu Catarres original, y otras que son más rockeras o "indies".
¿Temías que el público no aceptara estas nuevas sonoridades?
Al principio, a nosotros mismos nos costó abrir la mente y pensar que íbamos a hacer otra historia, porque veníamos de discos de formato muy acústico. Pero al final de la gira del año pasado, hicimos un concierto eléctrico y se nos abrió como otro mundo, otra dimensión. A partir de ese momento nos entraron ganas de introducir muchos instrumentos eléctricos e incluso sintetizadores. Inicialmente, no acabábamos de verlo claro, pero después vimos que todo iba encajando, y lo llevamos adelante.
¿Y cómo está recibiendo el público "Tots el meus principis"?
Muy bien. La gente se ha sorprendido por el cambio de estilo, òbviamente, pero el disco está gustando mucho. El público es muy abierto, más de lo que parece, y tiene ganas de escuchar otras historias. No hemos renunciado a nuestro estilo, pero sí que hemos incorporado otras sonoridades que teníamos ganas de explorar, y la gente las está recibiendo muy bien.
En los conciertos, además, el grupo debe ganar en tralla y energía.
Con todos los instrumentos acústicos, notábamos que las posibilidades de meter "chicha" se nos quedaban un poco cortas, por la propia potencia de estos. Ahora, las bases, el bajo, las guitarras eléctricas, dan un "punch" muy chulo a las canciones antiguas. Los directos son mucho más potentes.
¿Cuáles son las canciones de "Tots els meus principis" que están teniendo más exito?
"Fins que arriba a l’alba", sobre todo, pero también "Perfectes", "Martina", "Una cançó que em parla de tu". Al menos, por lo hemos detectado en Spotify y los conciertos. Ya en el primer concierto, el 6 de mayo, en el festival Cruïlla de Barcelona, la gente las cantaba todas. Nos moló mucho, que se supieran ya entonces todas las canciones del disco nuevo. Significó que estaba entrando muy bien.
¿Seguiréis tocando en directo las canciones de los anteriores discos?
Sí. En directo hacemos canciones de todos los discos. Quizá del que menos hagamos sea precisamente de este último, porque también tocamos varias de "Cançons 2011", "Postals" y "Big Bang".
Antes de empezar con la gira de conciertos, hicistéis otra de firma de discos en diversos establecimientos. No es algo muy habitual.
Lo hacen más los grupos de fuera. Que el artista que te gusta te pueda firmar tu disco, pensamos que es algo muy chulo. Una buena manera de conectar con la gente, que te expliquen las canciones que les gustan más, lo que les parece el disco, sinla presión de cuando después de un concierto te vienen a que les firmes, que hay ruido. En estos actos de firmas en las tiendas, puedes conversar un poco con cada persona, y mola mucho.
Una de la sorpresas de "Tots els meus principis" es que cada ejemplar del disco incluye una fotografía diferente, única, de Els Catarres. Ha tenido que suponer un montón de horas de trabajo.
Pues sí, "déu-n’hi-do". Hemos tenido que hacernos diez mil fotografías, y ahora hemos de hacernos más. Pero pensamos que la gente que, hoy en día, se compra discos, que ya no son demasiado funcionales, porque incluso muchos coches ya no llevan reproductores de cds, ha ce un esfuerzo. Y para agradecerles este esfuerzo de comprar este objeto que es un poco romántico, le añadimos una fotografía distinta y personalizada en cada ejemplar. Para que así cada disco sea único. A nosotros nos gustaría que nuestros grupos favoritos también hicieran cosas como éstas.