El consejero delegado de Caixabank, Gonzalo Gortázar, dijo ayer que el impuesto a las transacciones financieras que prevé el Gobierno sería “más razonable” que poner una tasa específica a la banca. Pero, precisó, habría que aclarar bien a qué transacciones afecta para evitar que dichas operaciones “se vayan” a otros países en los que no exista esa tasa.
Sería conveniente, pues, “desarrollar un marco para que esto sea efectivo, que no debería ser español, sino europeo”, añadió. En su comparecencia ante la comisión que investiga en el Congreso la crisis económica y el rescate a la banca, el “número dos” CaixaBank rechazó de plano la posibilidad de gravar a la banca con un impuesto específico, algo que no sería “justo” ni “lógico” puesto que, entre otras razones, las entidades que causaron la crisis y a las que hubo que rescatar en su mayoría “ya no están”. El rescate de la banca que ha costado mucho dinero a los españoles no lo deben pagar las entidades que no han sido problemáticas, dijo Gortázar,
Normativa más exigente
Ahora la banca está sujeta a una normativa más exigente, que establece que las entidades tengan mucho más capital y contribuyan al fondo único europeo de resolución y emitan también los nuevos pasivos más caros que en caso de crisis se puedan convertir en recursos propios y no afectar al contribuyente. En cuanto a la tributación en función de los ingresos, explicó que en cuanto a las personas físicas es justo que contribuyan más los que más tienen y ya se hace mediante los tramos actuales, pero su opinión fue la contraria en el plano empresarial.