Era un ladrón multirreincidente cuando aquel día de julio del 2017 asaltó un comercio de Terrassa, ubicado en el paseo del Comte d’Ègara, en el Centre. Forzó la puerta con un destornillador, entró y se fue por donde había venido después de sustraer 700 euros y una tarjeta de crédito. La Audiencia Provincial le ha impuesto una pena de tres años y un mes de prisión.
Estos eran los antecedentes penales habidos en su historial antes de aquel asalto de julio: el 16 de diciembre del 2013 un juzgado de lo penal de Terrassa lo castigó a un año de prisión por un delito de robo con fuerza en casa habitada o local abierto al público; el 25 de septiembre otra resolución, de otro juzgado de lo penal de Terrassa, le impuso tres meses y un día de cárcel por otro delito semejante. Sobre el mismo sujeto recayó otra sentencia condenatoria el 20 de marzo del 2015, también dictada por un órgano judicial terrassense. La pena indicada en el fallo: nueve meses de prisión.
Y el 30 de julio del 2017, a eso de las ocho de la tarde, el ladrón volvió a las andadas. Dice la Audiencia Provincial que llegó al paseo del Comte d’Ègara y utilizó un destornillador para violentar la puerta de acceso a un establecimiento, en aquellos momentos cerrado al público porque era domingo. Superado el obstáculo de la puerta, entró en el bazar y abrió la caja registradora, apropiándose de 300 euros. Luego se embolsó 400 euros más y una tarjeta, efectos que estaban guardados en una cartera. Huyó.
Unas cámaras de videovigilancia captaron al delincuente en su tarea de latrocinio. La unidad de investigación de los Mossos d’Esquadra en Terrassa fijó sus pesquisas en un individuo conocido en ámbitos policiales. El sospechoso era un terrassense de 31 años, de nacionalidad española.
Centradas las indagaciones en él, los agentes lo cazaron por otro delito. Uno más. Fue el 24 de agosto del mismo año. La comisaría recibió una comunicación sobre un robo en un aparcamiento de la calle de la Autonomia, en Sant Pere.
Según la alerta, un individuo había destrozado una ventanilla de un vehículo y también desvalijado su interior. Unos policías acudieron a la zona y detuvieron al sospechoso. Y el sospechoso era el tipo al que buscaban por el anterior robo en el bazar chino. Dos delitos esclarecidos en un solo golpe. El arrestado pasó a disposición judicial e ingresó en prisión preventiva.
rebaja fiscal
El Ministerio Fiscal formuló escrito de acusación y solicitó en principio seis años de prisión por el delito de robo con fuerza en el establecimiento del paseo del Comte d’Ègara, apreciando la circunstancia agravante de multirreincidencia.
La pena final se ha reducido, empero, pues el fiscal rebajó su petición a tres años y un mes de prisión y el acusado acabó reconociendo los hechos. Finalmente se llegó a una sentencia de conformidad que incluye el pago de una indemnización de 700 euros al propietario del negocio allanado.