Los Mossos d’Esquadra investigan la desaparición de una vecina de Terrassa. Se llama Mònica Borràs, tiene 49 años y sus allegados no saben de ella desde el martes 7 de agosto. Mònica Borràs es pensionista, mide 1,70, es de complexión gruesa y, según la información facilitada en redes sociales, en el momento de su desaparición iba ataviada con un vestido de color rosa. Los mossos llevan a cabo gestiones en centros sanitarios por si la desaparecida hubiese ingresado en un hospital. Al parecer, Mònica Borràs, ojos marrones, cabello castaño, salió de su domicilio, en Ca n’Aurell, a las once de la noche del 7 de agosto. A partir de entonces se perdió su rastro. “Otras veces se había marchado de casa, en un arrebato, pero volvía al cabo de unas horas”, cuenta un amigo a Diari de Terrassa.