Oliver Ballabriga se distingue por ser un entrenador que otorga a sus equipos una personalidad propia y una competitividad fuera de toda duda. El San Cristóbal se ha impregnado de su personalidad y así, en dos años, ha pasado de ser un recién ascendido a Primera Catalana a equipo de Tercera División. "Empezamos con muchas ganas e ilusión", señala el técnico, sabedor que esas dos cualidades quizás tópicas pero necesarias en cualquier colectivo les van a acompañar en el futuro más inmediato. "Sabemos que va a ser un año complicado a nivel deportivo porque nos vamos a encontrar a equipos con un gran nivel. Pero vamos a trabajar cada día, a disfrutar de la categoría como la temporada pasada y a hacerlo lo mejor posible."
En todo caso, señala que empezar la Liga el 19 de agosto en Tercera División no resulta demasiado lógico al tratarse de una categoría amateur. "Lo encuentro una locura. Es verdad que hay que cuadrar las fechas para hacer los "play off", pero cada vez nos exigen ser más profesionales y alguien no se da cuenta de que no lo somos. Tenemos familia, trabajo y necesitamos irnos de vacaciones, pero está montado así. Con el tiempo habrá que corregirlo."
El inicio de la temporada se presenta exigente y atractivo, con un derbi en Copa Catalunya ante el Terrassa el 29 de julio. "Nosotros vamos a preparar la temporada de la misma forma", señala el técnico parroquial. "No tenemos ninguna expectativa en esta competición, aunque sabemos que es un torneo bonito en el que si pasas ronda puedes jugar contra otro equipo de Tercera o de Segunda "B". Jugar un derbi gusta a la afición y supongo que habrá más gente de lo normal, pero a nivel personal me da lo mismo. No tengo ninguna ilusión especial por jugar contra el Terrassa ni por ganarle. Quiero jugar contra todo el mundo y ganarle a todo el mundo."
La permanencia como meta
Con la condición de nuevo en la categoría, el San Cristóbal trabaja con el único objetivo de obtener la permanencia. "Conseguirlo sería increíble. Y en un proyecto a largo plazo es necesario para el club. Por encima de eso, el objetivo es trabajar bien cada día, que la progresión sea positiva para todos y mejorar todos los que nos estrenamos en Tercera División."
Con siete fichajes realizados y catorce jugadores del ejercicio anterior, Ballabriga ha mantenido el bloque del ascenso como principal seña de identidad. "Vamos a competir en una categoría nueva y con rivales de mucho nivel. Dentro de nuestras limitaciones, era muy importante seguir con el bloque del año anterior porque es muy positivo tener a catorce jugadores que ya se conocen entre ellos. Este primer año era fundamental." En base a ello, dice que está "muy satisfecho" con el grupo de futbolistas que empiezan la pretemporada. "Al final de temporada se escuchaban muchos comentarios en relación a ofertas a nuestros jugadores y seguramente que las ha habido, pero todos los que hemos querido quedarnos se han quedado. Estamos muy a gusto en el club y eso se demuestra con estas cosas. Y a la mayoría de los que llegan de fuera ya los conocemos. Tienen el perfil que buscamos, chicos jóvenes con ilusión y alguno con experiencia en Tercera. Dentro de nuestro presupuesto, que seguramente es el más bajo de la categoría, estamos satisfechos con el equipo que hemos hecho."
Actualmente queda una ficha libre y la intención del técnico es contar con los juveniles que harán la pretemporada. "La idea es incorporarlos, pero veremos cómo se adaptan y las posibilidades que tienen. Tampoco queremos que los jóvenes se queden para no jugar. Decidiremos en función de los intereses de todos."
A nivel personal, la temporada también supone el estreno de Oliver Ballabriga en Tercera División. "Yo he tenido la buena o la mala suerte de jugar donde me lo he ganado, porque nadie ha venido a ficharme de una categoría superior. Estoy ilusionado como todos, y espero un año de mucho trabajo pero divertido. Llevo 17 años entrenando, sólo 4 en amateur, y espero en Tercera seguir aprendiendo cada semana".