Como arquitecto municipal (1892-1903), Lluís Muncunill proyectó y acabó materializándose la renovación de uno de los puentes que se construyeron para salvar la Riera del Palau en la Rambla d’Ègara. Diseñó el que enlazaba el Portal de Sant Roc con la calle de Gutemberg para sustituir al que se había colocado y era de madera. El nuevo puente de piedra entró en funcionamiento el 5 de mayo de 1899. Fue construido por la empresa Aymerich y Gorina y el Ayuntamiento facilitó a los contratistas la madera inservible que había en el patio del exhospital (donde hay ahora el Mercat de la Independencia) para el cimbrado (la estructura auxiliar para sostener de manera provisional un arco o una bóveda) al tiempo que les solicitaba que la tenían que devolver una vez lo habían descimbrado.
Valor final
Cabe decir que entre el presupuesto, la adjudicación y la factura hubo diferencias. Aymerich y Gorina consiguieron la obra por valor de 2.595 pesetas de la época (la propuesta económica de la subasta era la más económica) pero acabó presentando una factura más elevada, por importe de 2.935 pesetas. Al final, el Consistorio, con el beneplácito de Muncunill, no pagó ni una cantidad ni la otra. Abonó 2.799 pesetas. En puentes, el arquitecto también se encargó de dirigir el que se construyó a la altura del Mercat de la Independència para enlazar La Rasa con la calle de Volta. Este había sido dibujado por su antecesor en el cargo de arquitecto municipal, Ubaldo Iranzo, que cesó a título personal por discrepancias con el Consistorio. Asimismo, el arquitecto también concibió y dirigió en 1921 la obra de un puente en Les Fonts, cuya fotografía se conserva y forma parte del archivo de la familia, en concreto de Àngels Muncunill Ribas.
