Hoy se cumplen veinte años de uno de los partidos más recordados de la historia del Terrassa FC, el que supuso su derrota por 4 a 1 en el campo del Málaga en la última jornada de la promoción de ascenso a Segunda División. Aquella hecatombre cambió la historia de los dos clubs y todo lo que rodeó el encuentro alimentó la polémica.
Todo lo que rodeó aquel partido de Málaga ha pasado a formar parte de la mitología del terrassismo. La ciudad se paralizó aquel día para seguir una jornada histórica, se instalaron pantallas para ver el encuentro y la afición asistió incrédula a un desenlace inesperado que rescató los peores fantasmas del pasado. Las expectativas de futuro eran enormes, el club se preparaba para un crecimiento desconocido y el mazazo posterior resultó demoledor. Aquel partido duró mucho más que sus 90 minutos reglamentarios.
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