El Consejo de Colegios Veterinarios de Cataluña, que estima que solo en la ciudad de Barcelona habitan más de 9.000 gatos ferales agrupados en 700 colonias, ha alertado sobre la proliferación de los gatos callejeros y ha propuesto un programa para esterilizarlos para evitar su expansión.
Los veterinarios han presentado hoy en rueda de prensa el programa ‘GIF-vet’ para gestionar las colonias de gatos y esterilizarlos para hacer frente así a posibles problemas de salud pública.
Según ha explicado la representante del Colegio Oficial de Veterinarios de Barcelona, María Pifarré, el programa GIF-vet (Gestión Integral Felina Veterinaria) quiere actuar como organismo mediador y de control frente la creciente presencia de gatos ferales (que no tienen contacto con humanos) en las calles de toda Cataluña.
El programa también quiere intervenir aplicando un “criterio único” en todos los ayuntamientos y entidades de toda Cataluña.
GIF-vet surge a raíz de que, en condiciones favorables y sin ningún tipo de intervención o control veterinario, la progresión felina de crecimiento establece que una sola gata puede tener una descendencia indirecta de más de 1.700 gatos y gatas en solo tres años, según han explicado.
Además, la presencia incontrolada de gatos ferales en las calles de las ciudades y pueblos de Cataluña supone problemas en la salud pública, ya que, como ha explicado la coordinadora de programa GIF-vet, Alexia Falcó, comporta enfermedades como la zoonosis, transmisible a las personas, así como desperfectos y suciedad en el entorno, fruto de los restos de comida que la población les ofrece.
“Nos preocupa el bienestar y la salud pública, queremos velar por los animales, pero también por las personas de nuestra sociedad”, ha asegurado Pifarré.
El programa piloto se implementará en algunos ayuntamientos de Cataluña -que no han desvelado todavía- y se basará en la captura, esterilización y retorno a su entorno (CER) -que ya se hacía-, con el añadido de la identificación y control sanitario basado en la vacunación y la desparasitación cuando sea necesario.
Respecto a la fase de identificación del animal, que actualmente se hace mediante un pequeño corte en la oreja, también quieren implementar un microchip con un código de barras que ofrezca toda la información relevante del animal.
Los gatos ferales suelen ser felinos domésticos abandonados o de descendencia salvaje, y que agrupados en una colonia -controlada- de gatos serían esterilizados y convivirían en un espacio público y alimentados y cuidados por profesionales.
Las representantes han argumentado la importancia de contar con un control de estos animales porqué “está demostrado” que disminuye los problemas de sobrepoblación y “garantiza una integración adecuada a la realidad urbana”.
También “evita” el potencial riesgo sobre la salud pública y reduce al máximo el impacto sobre la fauna salvaje, han concluido.
El programa facilitará la atención veterinaria de los animales, elaborará un plan sanitario de las colonias y llevará a cabo la formación y apoyo para la educación de los cuidadores y alimentadores de los animales de las colonias.
El Consejo de Colegios Veterinario de Cataluña celebrará la primera Jornada Veterinaria y Salud Pública el próximo 7 de junio destinada a los profesionales veterinarios, responsables de la administración y protectoras de animales para hablar de la zoonosis, los cuidadores de las colonias de gatos y la normativa actual.