La calle Cremat es la ganadora de la XXII edición del Concurso de decoración de calles Montse Prat, un certamen que organiza el Ayuntamiento de Terrassa y Terrassa Centre. La céntrica vía comercial coge el relevo a la calle del Camí Fondo, que ganó el año pasado y que en esta edición se lleva una mención especial del jurado.
En una Fira Modernista dedicada a la cocina de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, los comerciantes de la calle Cremat han decidido adornarla con sacos de patatas, lentejas, café, tomillo, laurel, arroz y muchos otros productos alimenticios. Una decoración que han titulado "Cremat a granel". El jurado que les ha otorgado el primer premio del concurso ha tenido en cuenta tanto la decoración y ambientación de la calle, como de las fachadas y los escaparates comerciales. Se ha valorado también la originalidad, el diseño y la calidad artística, el grado de vinculación a la temática de la feria y el grado de implicación de los establecimientos de la calle.
"Nosotros participamos en este concurso desde su primera edición. Intentamos crear ambiente y hacer ciudad", explica Xavi Linares, uno de los comerciantes de la calle Cremat. "Es un poco terapéutico porque nos reunimos, hablamos de la temática de la feria, intentamos estar unidos y nos lo pasamos muy bien", asegura.
Al también presidente de Terrassa Centre le gustaría que hubiera "más esfuerzo y que otras calles se sumaran" a la iniciativa. "Hay calles emblemáticas a las que aún les cuesta participar en actividades como esta", asegura Linares, que opina que la Fira Modernista es "la fiesta más bonita de la ciudad".
"Cuando ves estas calles divertidas y llenas de ambiente te ilusiona. Nosotros intentamos decorar la calle según la temática de la feria aunque siempre buscamos ideas económicas. Como este año la Fira Modernista giraba entorno a la gastronomía y siempre intentamos colgar algo que sea muy visual, decidimos coger sacos de venta a granel y colgarlos", cuenta Linares.
Ocho calles inscritas
En la calle del Camí Fondo, otra de las ocho arterias pertenecientes a la zona donde se celebra la Fira Modernista que se inscribieron al concurso, la decoración se inspiró en el mundo de la vendimia. Uvas verdes y moradas hechas con papel y hojas de otoño sirvieron para engalanar la calle.
"Es el cuarto año que participamos en el concurso de la Fira Modernista. Hemos ganado dos veces", relata Marc Prat. "En enero o febrero empezamos a pensar en ello. Hacemos muchas reuniones y lo vamos preparando. Cada año intentamos basarnos en la temática de la fiesta. En esta ocasión, como la feria está dedicada a la gastronomía y hay varios bares y restaurantes que ofrecen una pequeña degustación de vinos, hemos colgado uvas y hojas, recordando la vendimia. Nos han ayudado varias escuelas", comenta Prat.
Más allá de la calle Cremat y el Camí Fondo, otra de las calles con un engalanamiento destacado fue la de la Rutlla, decorada con flores tanto naturales como de cartón, además de dos pequeños huertos. "Intentamos que haya una relación entre la temática de la feria y la ambientación de la calle y que esta esté enfocada a los niños", explica Eduard Figueras. En este sentido, los comerciantes organizaron un taller de pasteles con plastilina, un cuentacuentos con un trabajo posterior sobre el chocolate y otras actividades. En definitiva, un sinfín de propuestas y elementos decorativos para hacer más atractivo el paseo de todas las personas que visitan la Fira Modernista.