Es, sin duda, un clásico en el panorama del motocilismo egarense. Este año, encara su 41ª edición, con el mismo espíritu de siempre, que no es otro que pasar un buen rato y exhibir vehículos que forman parte de nuestra historia. Algunos, sin duda, son auténticas joyas. Este domingo, y organizado por la Escudería Motor Atlètic Terrassa Hockey Club (MATHC), los amantes de las motos podrán degustar de nuevo de un viaje al pasado y disfrutar de un recorrido que, como siempre, tendrá su inicio en las instalaciones del club terrassense, en Can Salas.
En la presentación de este Ral·li de Motos Històriques, el director de la carrera, Joan Amate quiso "poner en valor" que, esta prueba, desde sus inicios, en el año 1977, "siempre ha tenido la filosofía de ser una prueba de regularidad, y de ser una prueba deportiva".
Amate, también presidente de esta escudería, además, manifestó que "podemos decir que este es el rally decano del estado español, y uno de los más antiguos de Europa" y recordó que el más antiguo es el de Barcelona-Sitges, que este año ha celebrado su 60ª edición, y que, además, se trata de un encuentro de coches de época, no de motos.
Recorrido del rally
El recorrido del rally es de 100 kilómetros, debidamente señalizados, y se inicia en Can Salas. A las ocho de la mañana, los participantes (de momento han confirmado su asistencia unos 60 motoristas) se concentrarán y recibirán sus dorsales, cuyo diseño, ha variado levemente respecto a los del año pasado.
A las 9 de la mañana se iniciará la prueba de regularidad, que se medirá a lo largo de 34 kilómetros. El promedio propuesto por los organizadores es de 40 kilómetros por hora y, durante el trayecto, habrá una serie de controles secretos, con el fin de establecer con exactitud el promedio establecido por los participantes. Se prohibe todo tipo de aparato de medida moderno, como es el caso de los teléfonos móviles o los gps y, para este menester, se permiten otros como el cronómetro o el velocímetro.
Tras degustar un desayuno típicamente catalán en Navarcles, los participantes reanudarán su recorrido en dirección a Monistrol de Calders con destino Matadepera, donde se realizará otra parada y una exposición de las motos. Todo concluirá con la entrega de premios y un aperitivo. El precio de la inscripción, si se realiza de forma anticipada, es de 18 euros, un precio que, según Amate, colma debidamente todo lo que ofrece a los motoristas la organización.
Cumplir los requisitos
Las motos participantes han de cumplir los requisitos imprescindibles para poder circular por las vías públicas y, sus conductores, obviamente, han de estar en posesión del pertinente permiso para circular y del seguro obligatorio correspondiente. La prueba, además, cuenta con un camión de asistencia, por si se produce algún incidente, y una ambulancia medicalizada.
Las categorías son: Clase A – Antiguas (las fabricadas hasta el año 1903), Clase B – Veteranas (desde 1904 hasta 1918), Clase C – Vintage (desde 1919 hasta 1930), Clase D – Post Vintage (desde 1931 hasta 1945), Clase E – Post Guerra (desde 1946 hasta 1960), Clase F – Post Clasic (desde 1961 hasta 1970) y Clase G – Moderna (desde 1971 hasta 1980).
En cuanto a los premios, habrá trofeos para el primer clasificado en cada clase, para las categorías PreGuerra y Post-Gerra, a la mejor restauración de Preguerra y Clasica Sport, a la piloto femenina mejor clasificada y a la moto que acredite mayor antiguedad.