El Gremio de Libreros espera que, al volver Sant Jordi este año a ser día laborable, después de la jornada dominical de 2017, se incentivarán aún más “los buenos resultados de participación y de ventas de los dos últimos años”, ha explicado hoy la presidenta del Gremio de Libreros, María Carme Ferrer.
Ferrer ha remarcado hoy, en la presentación de la campaña de Sant Jordi, que “al ser el 23 de abril un lunes, muchas de las compras de los libros ya se producirán el fin de semana anterior, desde el viernes”, y en este sentido ha avanzado que numerosas librerías abrirán también el domingo.
La representante de los libreros catalanes ha agradecido en nombre de todo el sector a políticos y técnicos del Ayuntamiento de Barcelona que han hecho posible ampliar el espacio de las paradas, con 80 metros más en la avenida Diagonal y con 90 metros en la céntrica calle Consell de Cent, que “permitirá esponjar la superficie de circulación”.
Según datos de la Guardia Urbana, en Barcelona se movieron el pasado año entre 1,2 y 1,5 millones de personas y el 65% de las paradas se concentran en tres vías, las Ramblas, la Rambla de Cataluña y el Paseo de Gracia.
Estas medidas de esponjamiento se justifican, según los libreros, “no sólo por cuestiones de accesibilidad, sino también por motivos de seguridad”.
El presidente de la Cámara del Libro de Cataluña, Patrici Tixis, ha asegurado que “el sector está muy ilusionado por este Sant Jordi”, una jornada en la que “se venden unos 1,5 millones de libros y el sector factura cerca de 20 millones de euros”.
Tixis ha destacado que “el sector viene de dos años buenos y en las cifras en las que nos movemos creemos que hemos de intentar repetir los resultados del año pasado, cuando se facturaron 21,80 millones de euros y se había crecido un 4% respecto a 2016”.
Aumentar estas cifras, ha puntualizado, se podría conseguir sólo aumentando los días de Sant Jordi.
Para Tixis, el día de Sant Jordi se venden “libros de todo tipo” y es un momento del año de reconciliación con el lector porque es cuando el escritor encuentra el momento mágico al encontrarse con los lectores”.
Tixis ha desligado la situación del sector de la incertidumbre política en Cataluña y “no se pueden comparar las cifras de ahora con las del año pasado, porque aunque desde el último trimestre del año pasado notamos un freno en la venta de libros, desde hace ocho años, con el estallido de la crisis económica se han producido cambios en el consumo, que alterna momentos de estabilidad con dientes de sierra en Sant Jordi, Navidad y verano”.
Además, ha agregado Tixis, en el primer semestre del pasado año coincidieron novedades de varios autores superventas, algo que no se ha producido este año. “Ahora continuamos con la misma estabilidad después de una Navidad muy buena”.
En opinión de Tixis, el hecho de que Sant Jordi coincida con un lunes contribuirá a un aumento de ventas, pues “la gente comenzará a comprar libros el viernes y el sábado, y también podrá comprar el domingo, ya que muchas librerías abrirán sus puertas, sobre todo, en Barcelona”.
El sector, ha concluido Tixis, “no está en una situación como para tirar cohetes, y atraviesa por uno de esos momentos plano