Los sindicatos CCOO y UGT han convocado una huelga parcial para mañana, 8 de marzo, Dia Internacional de les Dones, para denunciar la desigualdad laboral y social entre hombres y mujeres y especialmente contra la brecha salarial, los bajos salarios y precariedad en el trabajo, que afecta sobre todo al colectivo femenino, y contra las violencias machistas. La huelga será en franjas de dos horas por turno, que son las dos horas que trabajan gratis cada día las mujeres respecto al salario de los hombres. "Es necesario, después del 8 de marzo, pasar de la huelga a priorizar los temas de igualdad en las mesas de negociación y en los espacios de concertación. Es aquí donde empezaremos a cambiar las cosas", afirmó ayer Enrique Rodríguez, secretario general de CCOO en el Vallès Occidental y la Catalunya Central, en una rueda de prensa conjunta con UGT para exponer la postura de ambos sindicatos ante la jornada de mañana.
"Todas las reformas y recortes, ahora con ayuda de Ciudadanos y antes con la de CiU, han afectado a la sociedad en general pero especialmente a las mujeres, como dejar sin recursos a la Ley de Dependencia o la reforma laboral que generó precariedad. Parece que quieren volver a una época gris en la que la sociedad del bienestar giraba en torno a la mujer", añadió Rodríguez. En el acto, que se celebró en la sede local de CCOO, también participaron Maribel Ayné, secretaria de Comunicació i Polítiques d’Igualtat i Dones de este sindicato en la comarca, así como Sandra Cañete y Montserrat González, responsables de Comunicació y de Formació i Dones de UGT en el Vallès Occidental, respectivamente.
Empresas pequeñas
Según Rodríguez, hasta las mesas de negociación se deben plantear asuntos como que los planes de igualdad se apliquen también en las empresas de menos de 25 trabajadores; eliminar la precariedad laboral, que afecta más a las mujeres; que las licencias de paternidad se equiparen a las de maternidad; políticas activas de perspectivas de género, y medidas de transparencia salarial, entre otras. Los sindicatos aseguran que la brecha salarial es del 24% en el sector privado, pero también se da en el sector público con el 15%. En el caso de las profesiones menos cualificadas, la brecha es del 37%; y en las pensiones para las mujeres jubiladas, del 38%.
"Esta es una huelga ideológica contra el patriarcado y el capitalismo que asumen como propio las patronales y potencian la desigualdad en beneficio propio. Es una huelga contra la desigualdad y por el reparto equitativo de la riqueza", dijo Maribel Ayné. Se trata de un paro pensado para que lo protagonicen las mujeres, y también los hombres, aunque se pide que sean los hombres los que cubran los servicios mínimos. "No es una huelga contra los hombres porque buscamos un beneficio para todos. Si avanzamos nosotras, lo haremos todos. No queremos igualar nuestros salarios de miserias, sino que ambos tengamos salarios dignos", añadió esta sindicalista.
Por su parte, Sandra Cañete, de la UGT comarcal, explicó que la desigualdad de género se asume "como algo estructural", contra lo que se debe luchar. La precariedad, sostienen estos sindicatos, tiene nombre de mujer y la "femenización" de la pobreza es algo contrastado. Cañete aseguró que la brecha salarial no "entiende ni de profesión ni de sector ni de nivel de estudios" y que se plasma en los salarios a través de los "complementos, donde los hombres tienen de media seiscientos euros y las mujeres, cien". Esta sindicalista añadió que las empresas españolas se ahorran todos los años 42 mil millones por la desigualdad salarial, por lo que huelga de mañana es "una huelga contra el capital". Por su parte, Montserrat González remarcó que la desigualdad sigue más allá de la vida laboral, ya que el "40% de las viudas tienen pensiones de miseria".