La conselleria de Territori i Sostenibilitat anunciaba el pasado mes de noviembre a bombo y platillo la aplicación de restricciones de tráfico en los episodios de contaminación, momentos en que sólo podrán circular por el denominado Àmbit 40 -poblaciones del Barcelonès, Baix Llobregat, Vallès Occidental y Oriental- los vehículos con el distintivo ambiental de la DGT. La medida, sin embargo, está congelada a la espera de que la Dirección General de Tráfico reforme el reglamento de circulación.
El Pla d’Actuació per a la Millora de la Qualitat de l’Aire. Horitzó 2020, establece el compromiso de reducir un 30% las emisiones relacionadas con el tráfico en un periodo de 15 años.
La primera medida anunciada por la Generalitat para alcanzar ese objetivo fue la limitación del tráfico en el ámbito delimitado por las rondas de Barcelona en días de alta contaminación. La medida no se ha puesto en marcha porque aún no se han alcanzado niveles puntuales de alta contaminación. Cuando eso ocurra, irá acompañada de un plan de refuerzo del transporte público.
La restricción de mayor alcance en las localidades del Àmbit 40, pendiente del nuevo reglamento de circulación, se ajustará al protocolo que establezca cada ayuntamiento para la reducción de las emisiones de NO2 en su territorio.