"Estoy satisfecho de como se ha desarrollado la final. Hubiera preferido plantar más cara, pero hemos hecho una muy buena primera parte e incluso hemos estado bien en la segunda hasta donde nos ha aguantado el físico. Está claro que ellas son infinitamente superiores a nosotras. Tienen un presupuesto que cuatriplica varias veces al nuestro y competir, no sólo en la final, sino como lo hemos hecho durante todo el torneo, es para estar muy satisfechos. Algún año estaremos más cerca de ellas, pero ahora lo que nos toca es estar en estas finales y perderlas de catorce goles". Así se expresaba Xavi Pérez, entrenador del CN Terrassa, tras la final del domingo en la piscina Pere Serrat del barrio de Sants.
Entiende Pérez que esta final fue más igualada que la de hace cinco años en Sant Feliu, que acabó en un 2 a 24. Curiosamente, también entonces las egarenses eliminaron en semifinales al Mediterrani. "Le hemos plantado mucha más cara al Sabadell y no le hemos perdido la cara al partido en ningún momento excepto al final, cuando ya no podíamos más y ellas seguían frescas. Pero me voy muy satisfecho con el papel de las chicas". En relación a la globalidad del torneo, el entrenador egarense apuntó: "Tuvimos la suerte de evitar a Sabadell, Sant Andreu y Mataró en el cuadro, pero hemos hecho nuestro trabajo. Sabíamos que no iba a ser fácil. Hicimos un gran papel ante el Zaragoza y ganarle en casa al Mediterrani como lo hicimos tiene un mérito increíble. Para nosotras, ese partido era la auténtica final. Pero hemos soñado hasta el último minuto. Estoy seguro de que esto nos dará mucha fuerza de cara a la liga. Podemos meternos entre los cuatro primeros y dar un paso adelante jugando el "play off". Y añadió: "Todos los entrenadores del club hacen un trabajo bestial en todas las categorías y eso nos permite tener gente para competir al máximo nivel. Solamente dos de estas jugadoras estaban el año 2013 en Sant Feliu", apuntó en referencia a Sandra Domene y Anna Roldán.
Las jugadoras, exultantes
Pese a la previsible derrota, los rostros de las jóvenes waterpolistas del CN Terrassa destilaban satisfacción por el trabajo bien hecho. La portera Sandra Domene explicó: "Pese a la derrota, estamos satisfechas. No ha estado mal, pero podía haber estado mucho mejor. Teníamos delante un rival con un nivel increíble. Sabíamos que era muy difícil, pero no nos hemos rendido en ningún momento. Ganar al Sabadell no está en nuestras manos todavía", comentó la guardameta del CN Terrassa, una de las dos únicas "supervivientes" de la pionera final del año 2013.
Olga Descalzi, por su parte, comentó: "Ha sido un partido duro, pero hemos estado muy bien. Sabíamos que nos enfrentábamos al mejor equipo de España, pero lo hemos dado todo. Nos vamos más con la sensación de haber ganado la plata más que con la de haber perdido el oro", dijo.
Quien sí estaba en esa plantilla del CN Terrassa que jugó la primera final de la Copa de la Reina era la boya Paula Leitón, que ha ganado ya dos Copas con el CN Sabadell. Fue la primera en felicitar a las que fueron sus compañeras y siguen siendo sus amigas. "Es muy especial jugar contra el Terrassa. Han peleado todo lo que han podido. Por ahora, nosotras somos superiores, pero quien sabe como serán las cosas dentro de unos años", dijo.