La Federació d’Associacions de Veïns de Terrassa (FAVT) ha modificado sus estatutos para dar una mayor operatividad a su junta y representatividad a las AVV federadas. La asamblea de la entidad, reunida en sesión extraordinaria el sábado, votó por mayoría un nuevo marco estatutario que entrará en vigor durante el primer cuatrimestre de 2018, coincidiendo con la renovación de cargos.
Una de las novedades más importantes de la reforma estatutaria pasa por la obligatoriedad de presentar candidaturas cerradas en las elecciones a nueva junta y presidencia de la FAVT. Hasta ahora la asamblea escogía a los integrantes de la junta y estos votaban al presidente y repartían los cargos.
La reforma obliga a conformar una candidatura cerrada, pactar un programa y presentar una propuesta de presidencia y equipo. Será la asamblea la que escoja directamente a la nueva dirección.
Precisamente este fue uno de los temas que más debate generó durante la asamblea del sábado. Dos horas se invirtieron en analizar los pros y los contras de las listas abiertas y las listas cerradas. Finalmente los nuevos estatutos salieron adelante casi por aclamación, con 11 votos a favor y una abstención.
La asistencia a la asamblea fue discreta el sábado. De las 27 AVV federadas solo trece acudieron a la reunión en el Casal de Ca N’Aurell. Dos de las entidades excusaron su asistencia y el resto -doce- no respondieron a la invitación a participar.
En los nuevos estatutos votados el sábado la junta de la FAVT pasará a tener entre 6 y 9 miembros. La última dirección arrancó con 18 integrantes y, aunque en la actualidad quedan diciesiete, la media de asistencia ronda los once. "Se trataba de dar una mayor operatividad a la junta – explica Ramon Clariana, presidente de la FAVT-. De ahí la propuesta de acotar para hacerla más ágil". Los estatutos incorporan también una cláusula que permitirá sustituir a los integrantes de las juntas que se ausenten de manera reiterada.
Hasta ahora, las AVV continuaban formando parte de la junta aunque sus representantes no asistieran a las reuniones de trabajo. Con la modificación de estatutos, después de tres ausencias injustificadas se contactará con la AVV para que concrete si está en disposición de asistir a la junta y, en caso contrario, se abrirá la puerta a otras entidades para que ocupen la plaza libre.
Consejo gestor
A partir de 2018, la FAVT contará también con un consejo gestor, un organismo participado por todas las asociaciones de vecinos federadas que se reunirá trimestralmente para hacer seguimiento del cumplimiento del programa y del plan de trabajo de la junta.
Las asociacions de vecinos tendrán un representante en el consejo, que funcionará como órgano intermedio entre la dirección y la asamblea, en la que participan también todas las AVV federadas. "El Consejo gestor pretende ser una herramienta de transparencia que permita a las entidades conocer de forma regular el trabajo de la junta", explican desde la FAVT.
El consejo, por ejemplo, será el encargado de escoger el relevo en caso de baja en la junta y podrá someter a votación si hay más de una candidatura.