Albert Oliver es el jugador más veterano de la Liga ACB. Hace unos meses se cumplieron veinte años de su debut en la máxima categoría del básquet español, cuando era un aspirante a jugador de elite en las filas del Joventut de Badalona. Criado en la cantera del Sferic, Oliver había pasado por alguna selección española formativa y en 2005 se perdió los Juegos del Mediterráneo después de dar positivo en un control antidoping por la utilización de un crecepelo que contenía una sustancia prohibida. No fue ni sancionado. Su extraordinaria carrera deportiva alcanzó su punto culminante la semana pasada, con su debut en la selección española absoluta. A sus 39 años ha batido otro récord, el de ser el debutante de más edad en el combinado absoluto. "Es extraño, pero estoy encantado", dijo en relación a su convocatoria.
La selección española ha debutado en la fase de clasificación para el Mundial de 2019 en China con un grupo de jugadores poco habituales. El conflicto entre la FIBA y la Euroliga, con calendarios coincidentes, ha impedido que jugadores que actúan en la NBA o en equipos que participan en la máxima competición continental de clubs hayan podido participar en los partidos de la selección. Y esa circunstancia ha abierto las puertas a nuevos jugadores, entre ellos Albert Oliver.
Aportación
Pese a la dificultad del escenario, España ha resuelto sus dos primeros compromisos de forma impecable. Ganó a Montenegro a domicilio por 66-79 y a Eslovenia en casa por 92-84. Albert Oliver participó en los dos partidos. En el primero de ellos jugó 12 minutos y 10 segundos, con una estadística de 2 rebotes capturados y 2 asistencias. En el segundo estuvo en pista 13 minutos y 26 segundos, con un rebote y 2 asistencias. En ninguno de los dos encuentros pudo inaugurar su cuenta anotadora.
Albert Oliver sabe que su participación en la selección absoluta ha venido derivada de esta extraña situación que ha impedido actuar al grupo más habitual de internacionales. Pero ha disfrutado de la experiencia, igual que sigue disfrutando de su experiencia diaria en la Liga ACB como componente del Herbalife Gran Canaria, donde está viviendo una etapa extraordinaria a nivel individual y colectivo.
El caso de Albert Oliver es poco frecuente en la historia del básquet terrassense. De hecho, se trata del segundo internacional absoluto que ha dado la ciudad. Con anterioridad gozó de dicha condición el pívot Guillermo Rubio, quien participó en siete encuentros con la selección española en 2009. Rubio había sido un habitual en las selecciones formativas y con la sub-20 se proclamó subcampeón de Europa. El jugador terrassense formó parte, en calidad de invitado, de la selección absoluta que preparaba el Campeonato de Europa. Debutó el 14 de agosto de 2009 en un partido amistoso contra Cuba, en el que anotó 4 puntos. Durante los siete partidos en que intervino, anotó 10 puntos, capturó 11 rebotes y puso 2 tapones. Rubio, de 35 años de edad, sigue en activo en las filas del Breogán de Lugo.
Otros internacionales
La historia del básquet local cuenta con varios jugadores que han pasado por selecciones formativas, aunque no han llegado a participar en el equipo absoluto. El primer caso lo encontramos en 1967, cuando Jesús Ester Ureña, de 12 años de edad, formó parte de la selección española que compitió en el primer Campeonato del Mundo de minibasquet. Jesús Ester medía 1,62 metros y actuaba en la posición de pívot. Jugaba en las filas del Dosa. Aquel novedoso Mundial se disputó en la población norteamericana de Scranton, en el estado norteamericano de Pensilvania. Se eligió aquella sede porque era la ciudad donde vivía el inventor del minibasquet, Jay Archer.
Posteriormente, en las selecciones inferiores jugadores como el pívot Javi Ruiz o el base José Manuel Navarro también tuvieron protagonismo. Navarro, por ejemplo, fue campeón del mundo con la selección española sub-22 en 1989.