El núcleo urbano de Vacarisses amaneció el viernes lleno de pintadas españolistas, que se repartieron entre el mobiliario urbano, paredes de viviendas y la Escola Font de l’Orpina, con la que se cebaron especialmente y donde escribieron "No més adoctrinaments". El lema "Viva España" y pintadas con la bandera española también ocuparon este y otros espacios, como fue el caso del cartel informativo situado en la entrada del pueblo. Se trata del segundo episodio de estas características que se produce en el núcleo urbano en las últimas tres semanas.
Además, recientemente intentaron manchar con pintura la estelada que hay colgada en la montaña del Cingle. Sin embargo, al autor o autores de la gamberrada no les salió bien y la pintura se desparramó por el suelo, lo que el Ayuntamiento considera un atentado ecológico por el que pedirá responsabilidades.
El Consistorio y las ampas de las escuelas Font de l’Orpina y Pau Casals y del Institut Vacarisses condenaron las pintadas del viernes. El comunicado municipal afirma: "Condenamos las pintadas en espacios públicos y en casas privadas, en centros escolares y en espacios naturales donde se considera delito ecológico". "Especialmente graves -prosigue el comunicado- nos parecen las pintadas aparecidas en los diferentes centros escolares de Vacarisses, señalando estos lugares como si fuesen espacios de adoctrinamiento. Queremos manifestar nuestro apoyo a la escuela pública catalana y, en especial, a los centros escolares de Vacarisses, donde se esta realizando una gran tarea para la cohesión social y la educación general de nuestros niños".
"Sentarse y hablar"
En la nota, el Ayuntamiento parece apelar al autor o autores de las pintadas -o al menos, a los que comparten su ideología- al afirmar que "reiteramos nuestra predisposición a recibir a todo aquel que tenga cualquier cosa que decirnos, e invitamos a debatir públicamente sobre la escuela, la educación, el modelo de país, etc. Sentarse y hablar es la mejor manera de trabajar por la convivencia".
Por su lado, el Ampa de la Escola Font de l’Orpina emitió un comunicado, al que se han adherido las Ampas de la Escola Pau Casals y el Institut Vacarisses, rechazando estos actos vandálicos y mostrando su "incondicional apoyo y respaldo al equipo directivo y los maestros por el trabajo que llevan a cabo con nuestros hijos". "En nuestra escuela -afirma el Ampa contundente- NO se adoctrina ni se ha adoctrinado nunca. Al contrario, se enseña a nuestros hijos y se les dan las herramientas necesarias para que puedan pensar libremente, siempre desde el respeto y la tolerancia hacia los demás".
El alcalde de Vacarisses, Antoni Masana (ERC), calificó ayer las pintadas de "ataque indiscriminado" y mostró su preocupación por el hecho de que estos episodios se repiten cada vez con mayor frecuencia. "Llevamos tres o cuatro en muy poco tiempo", concretó.
Masana desveló también que ha sufrido este tipo de ataques en su propio domicilio -dos en poco tiempo-, con pintadas en las paredes de su vivienda y en el suelo, al lado de la puerta de entrada.
