Ya no quedan víctimas de los atentados del 17 de agosto en los hospitales. Una mujer, la última persona herida en los ataques que quedaba ingresada, recibió ayer el alta médica en el hospital universitario Mútua Terrassa.
Así lo comunicó el Departament de Salut en uno de los comunicados de balance de los heridos que difunde cada cierto tiempo para dar cuenta de la evolución de las víctimas. A finales de septiembre aún permanecían hospitalizadas cinco personas: dos en el hospital de Sant Pau, una en el Hospital del Mar, otra en el Sagrat Cor y otra más, la quinta, en Terrassa, en el hospital radicado en la plaza del Doctor Robert. Días atrás, una confusión en las informaciones oficiales hizo creer que la mujer ingresada en Mútua había obtenido el alta médica, pero no era así. La herida continuó hospitalizada en Terrassa hasta ayer.
Reconocimiento
Había resultado herida en el atropello masivo cometido por uno de los terroristas en Las Ramblas de Barcelona aquella tarde aciaga, la del 17 de agosto pasado. Allí, el comando yihadista asesinó a catorce personas, dos de ellas vecinas de Rubí; uno de los fallecidos rubinenses era un niño de 3 años. Poco después del atropello murió apuñalado un joven en otra zona de Barcelona. Horas más tarde, el comando atentó en Cambrils, donde los terroristas mataron a una mujer.
Los profesionales de MútuaTerrassa, junto a los del resto de hospitales que atendieron a las víctimas, recibieron un homenaje de reconocimiento a finales de septiembre. El hospital terrassense se ofreció desde el primer momento a colaborar en el dispositivo de apoyo a las víctimas. En los días posteriores a la masacre atendió a tres heridos que residían en el área de influencia del centro médico. Uno obtuvo el alta el 28 de agosto. Otro, el 5 de septiembre. La última víctima salió ayer de Mútua.