La administración concursal anunció ayer un primer expediente de regulación de empleo (ERE) de 560 trabajadores de Unipost, casi el 25% de la plantilla, para diciembre y que se ampliará de forma progresiva hasta mayo para despedir al resto de trabajadores, según fuentes sindicales. En este primer ERE, por tanto, están incluidos parte de los 45 trabajadores de la oficina de Unipost en Terrassa. Según Juan Carlos Rodríguez, secretario general de la UGT en Unipost en Catalunya, en esta primera fase, en la oficina egarense serán despedidos diez trabajadores. En cualquier año, añadió, la cifra final de los despidos en este primer ERE a nivel general dependerá de "cómo siga la empresa hasta diciembre, es decir, que pueden ser más o menos".
El operador postal Unipost está en concurso de acreedores y ya presentó un expediente de extinción que afectaba a la totalidad de la plantilla. El sindicato CCOO anunció ayer que solicitará la calificación de "concurso culpable" al considerar como responsable de la situación de la empresa a Pablo Raventós, uno de los fundadores de la compañía, al que exigirá que responda con sus bienes personales para pagar a la plantilla los más de 6 millones que les adeuda, tal y como informó ayer Efe. Según informó CCOO, ayer se celebró la segunda reunión del periodo de consultas del ERE de Unipost, en la que la administración concursal adelantó un calendario provisional del ERE a los sindicatos en el que se contempla en una primera fase la extinción de 560 empleos el próximo mes de diciembre.
A la espera de un comprador
En una segunda fase, y de forma progresiva hasta mayo, si la tesorería de la empresa lo permite, el ERE afectaría al resto de la plantilla, hasta 1.730 trabajadores. Para la primera fase del ERE, la administración concursal no contempla la supresión de la actividad en ningún ámbito territorial, sino el ajuste de recursos para dar un servicio mínimo en todos los centros. Para el sindicato es prioritario tomar las iniciativas necesarias para mantener la actividad a partir de enero, para lo que es imprescindible la aparición de un comprador si se quiere evitar el cierre de centros.
Durante la reunión, la administración concursal no pudo avanzar nada de la posible operación de compra de Unipost porque, según ella, no es el momento de desvelar los nombres del o de los posibles compradores. CCOO ha vuelto a pedir al Gobierno que intervenga e impida lo que puede convertirse en uno de los mayores ERE de los últimos años, con el despido directo de 2.400 trabajadores y unos 2.000 indirectos de otras empresas asociadas. Ha exigido de nuevo un plan de viabilidad para la empresa, que pasa por la salida de Raventós y por la aparición de un comprador que asegure el empleo.