El fiscal general del Estado, José Manuel Maza, ha dicho hoy que el Gobierno, dependiendo de la respuesta del presidente catalán, Carles Puigdemont, tendrá ya planificado cómo aplicar el art. 155, y sobre una posible intervención de la Fiscalía en este tema ha recordado que siempre actúa “a posteriori”.
“A lo que a nosotros respecta siempre actuamos a posteriori, es decir, nunca intervenimos ni hacemos ningún tipo de actuación si no es ya cuando los hechos se producen de forma inevitable y, por supuesto, en este momento no deseados por nadie”, ha explicado.
Lo ha declarado durante el acto de celebración en Madrid de la patrona de la Guardia Civil, donde Maza no ha querido “adelantar acontecimientos” y ha abogado por mantener “la esperanza e ilusión” para que la crisis catalana acabe bien.
En relación a la declaración de Puigdemont en el Parlament, Maza ha recalcado que la Fiscalía “no ha tomado ninguna medida especial en este momento”; “veremos cómo se desenvuelven los hechos”, ha añadido.
Maza ha opinado que si el Ejecutivo ha pedido “aclaración” a Puigdemont es porque “muchas personas no han acabado de entender muy bien lo que ha dicho”.
Preguntado por las consecuencias de aplicar el 155, Maza ha afirmado que será “la sustitución de todo o parte de las instituciones autonómicas que se consideren oportunas durante un tiempo, limitado, hasta que todo regrese a la legalidad constitucional y legal”.
“Soy muy positivo siempre, pienso que esto tendrá un buen fin, aunque quizá tardando un tiempo, eso sí”, ha recalcado.
También ha asegurado que los fiscales tienen las instrucciones generales de siempre, que ante cualquier hecho delictivo lo identifiquen y lo reporten, y la Fiscalía de Menores se fija en los posibles hechos u actos que han podido sufrir los pequeños y adolescentes en Cataluña.
Además, actuarían si hay problemas de orden público, aunque espera que “no sucedan”.
El fiscal general del Estado ha valorado asimismo el comportamiento y la actitud de los fiscales en Cataluña, subrayando que no se podía imaginar “hasta con qué grado de unidad, de espíritu de servicio y discreción están actuando”, a pesar de sufrir “en sus propias carnes” escraches o insultos como, por ejemplo, en la sede de Tarragona.
“La Fiscalía está comportándose de una manera admirable y los fiscales catalanes con un mérito extraordinario” al igual que los jueces catalanes.
“Al final todos están en el mismo servicio de hacer que allí se cumpla la ley y de una vez se respete la Constitución”, ha añadido.