Agentes de la Guardia Civil están registrando un antiguo local del semanario El Vallenc, en Valls (Tarragona), en el marco de su actuación para detectar si se está confeccionando material susceptible de ser utilizado en el referéndum de independencia del 1-O.
Fuentes de la investigación han informado a Efe del registro en el antiguo local del semanario pero desconocen si se realizará en el local anexo, donde se ubica la redacción de este medio de comunicación local y comarcal.
El registro se está efectuando por orden de la Fiscalía con la intención de averiguar si en este lugar se está elaborando material electoral para el referéndum del 1-O, han añadido las fuentes.
El propio medio de comunicación ha confirmado el registro y el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, se han hecho eco del mismo en el transcurso de su intervención en el Consell Nacional del PDeCAT.
Con anterioridad a la actuación de hoy, agentes de la Guardia Civil terminaron ayer el registro de la imprenta de Constantí (Tarragona), por si podría estar preparando documentación relacionada con el referéndum del 1 de octubre. En esta empresa se imprime precisamente El Vallenc.
Según informó el abogado de la imprenta Indugraf, Tomàs Gilabert, al término del registro, los agentes no incautaron nada.
Según ha dicho hoy un portavoz del semanario de Valls, “los agentes están registrando un antiguo local” del medio, anexo a la actual redacción, una planta baja de la plaza La Torratxa.
Frente al semanario, protegido por media docena de agentes de la Guardia Civil, se han congregado medio centenar de personas con banderas independentistas y de la ANC, en protesta por la actuación policial. Han cantado “Els Segadors” y han coreado lemas como “¡Votaremos!”.
Según ha indicado el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en su intervención ante el Consell Nacional de su partido, “pueden intervenir imprentas o sitiar un medio de comunicación local con guardias civiles, pero el lunes con la Diada les desbordaremos democrática y pacíficamente, y el 1 de octubre con las urnas”.
Puigdemont ha considerado, además, que, cuando “en un pueblo hay una mayoría muy evidente que desea votar”, se genera “una cadena de responsabilidades invencible e indestructible”, por lo que el referéndum acabará celebrándose, “pese a las suspensiones, las querellas y las inhabilitaciones”.