Cristiano Ronaldo, internacional portugués del Real Madrid, afirmó ayer tras prestar declaración en el Juzgado de Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón como investigado por posible delito fiscal contra la Hacienda Pública que “jamás” ha “ocultado nada” ni “ha tenido intención de evadir impuestos”.
La Fiscalía acusa a Cristiano Ronaldo de cuatro delitos contra la Hacienda Pública cometidos entre 2011 y 2014 y que suponen un fraude tributario de 14.768.897 euros. Las cuotas supuestamente defraudadas son de 1,39 millones en 2011, 1,66 en 2012, 3,20 en 2013 y de 8,5 en 2014.
En un comunicado, Cristiano subraya: “La Hacienda española conoce en detalle todos mis ingresos, porque se los hemos entregado; jamás he ocultado nada, ni he tenido intención de evadir impuestos”.
“Siempre hago mis declaraciones de impuestos de manera voluntaria, porque pienso que todos tenemos que declarar y pagar impuestos de acuerdo a nuestros ingresos. Quienes me conocen, saben lo que les pido a mis asesores: que lo tengan todo al día y correctamente pagado, porque no quiero problemas”, dice el futbolista.
Según el texto, Ronaldo, que declaró durante una hora y media ante la jueza, el abogado del Estado, el fiscal y su propio letrado, sin necesidad de intérprete, estuvo “tranquilo y satisfecho” por haber podido colaborar con la Justicia y no hará más declaraciones sobre este tema hasta que concluya el proceso.
“Es el momento de dejar trabajar a la Justicia. Yo creo en la justicia y espero que, también en este caso, haya una decisión justa. Y con el fin de evitar presiones innecesarias o de contribuir a un juicio paralelo, he decidido que no volveré a hacer más declaraciones sobre este asunto hasta que no se produzca dicha decisión”, señaló el jugador.
Ronaldo añadió que expuso a la jueza que no creó ninguna “estructura especial” para gestionar sus derechos de imagen cuando llegó al Real Madrid en 2010, sino que mantuvo la que los gestionaba en Inglaterra cuando jugaba en el Manchester United.
“Los abogados que me recomendó el Manchester United la crearon en 2004, mucho antes de que pensara venir a España. La estructura fue la que era usual en Inglaterra, fue comprobada por la Hacienda inglesa y ratificaron que era legal y legítima”, continuó el jugador, que entró y salió del juzgado por el garaje, pese a que se había comunicado que haría una declaración pública ante la prensa.
El jugador explicó que la estructura empresarial de gestión de sus derechos de imagen es la misma en el periodo 2010-2014 -en el que la Fiscalía acusa a Ronaldo de crear una estructura societaria para defraudar 14,7 millones de euros de forma “consciente” y “voluntaria”- que en el periodo 2004-2009.
Según aseguró el jugador portugués, entre ambos periodos solo hay dos diferencias: se suprimió una entidad inglesa “innecesaria al no residir en aquel país” y “se aseguró de cobrar la totalidad de los derechos de imagen personalmente mientras era residente en España, para pagar los impuestos españoles”.
Ninguno de estos dos cambios tenían como finalidad eludir el pago de impuestos u ocultar ingresos, según el comunicado remitido por el jugador del Real Madrid, en el que se especifica que a partir del año 2015, el jugador decidió ceder sus derechos de imagen a un tercero independiente “pagando sus impuestos por ello”.
Desde el punto de vista de los asesores del jugador, las diferencias de la Fiscalía con las declaraciones presentadas radican en la cuantificación de qué parte de lo cobrado por cesión de derechos de imagen debe considerarse como obtenido en España entre 2010 y 2014, cuando era un impatriado, y si los cobros por derechos de imagen debieron haberse declarado año a año en lugar que de una sola vez, como hizo el jugador en 2014.
Ronaldo ingresó al juzgado ayer poco antes de las 11.00 horas a través del garaje del edificio donde está situado, por lo que evitó a los dos centenares de periodistas y las cuarenta cámaras de televisión que le esperaban en la puerta principal.
El jugador portugués también salió por el garaje, después de hora y media, sobre las 13.00 horas, pese a que se había dispuesto un estrado para que pudiera hacer una declaración ante los periodistas.
Tras su salida, sus asesores dijeron desde el estrado que el jugador se había marchado y aclaró que no haría declaraciones, pese a lo que se había acordado anteriormente, lo que provocó algunos abucheos de los presentes. Posteriormente, Cristiano emitió este comunicado.