El egarense Ramon Mampel, seleccionador español de tenis de mesa adaptado, acaba de llevar a la selección española a lo más alto del podio en el Campeonato del Mundo de esta modalidad que se ha celebrado en la capital eslovaca, Bratislava. No es, ni muchísimo menos, el primer éxito que consigue el palista terrassense al frente de la selección española. Mampel trabaja tanto con jugadores válidos como con deportistas paralímpicos, entre los que existe un nivel elevadísimo. Lleva siete años desempeñando las funciones de coordinador de tenis de mesa del Comité Paralímpico Español, a la vez que ejerciendo de seleccionador cada vez que se requiere su presencia en una cita europea, mundial o paralímpica. Su trabajo fundamental consiste en pulir a las nuevas promesas del tenis de mesa español en las instalaciones del Centre d’Alt Rendiment (CAR) de Sant Cugat del Vallès.
Mejorando en silla
La competición adaptada de tenis de mesa se divide en un total de once categorías o clases. Las que van del número 1 al 5 son en silla de ruedas, siendo la clase 1 la de quienes sufren una afectación más severa y la 5 la más leve. Las clases del 6 al 10 son para quienes juegan de pie, con la misma disposición de mayor a menor severidad que en la anterior modalidad. Finalmente, la clase número 11 es para los discapacitados intelectuales.
España es actualmente una de las potencias mundiales dentro del deporte del tenis de mesa adaptado junto a otros combinados continentales, como es el caso de Francia, Polonia, Suecia, Austria y Alemania. Y en el Mundial de Bratislava, los chicos de Mampel cosecharon nada más y nada menos que una medalla de oro y dos de bronce. El gallego Alberto Seoane, que lleva cinco años entrenando en el CAR con Ramon Mampel, se colgó el metal más preciado en la clase 6.
Dos bronces
Asimismo, la selección española cosechó otras dos medallas en Bratislava, los bronces para los equipos de las clases 3 y 10. “Tanto yo como los integrantes del cuerpo técnico y los directivos estamos tremendamente satisfechos por los resultados conseguidos en este último Mundial. Hacía tiempo que no lográbamos medalla en la clase 3. Somos muy buenos en pie, pero nos estaba costando un poco más en silla”, explica Mampel.
Mampel deja claro que el tenis de mesa es uno de los deportes que más alegrías da al deporte paralímpico español. “En realidad somos uno de los deportes que mejor ratio de medallas consigue dentro del Comité Paralímpico Español y eso es siempre un orgullo para todos nosotros”, explica el terrassense, que recuerda con indisimulado orgullo que el abanderado español en los pasados Juegos de Río fue uno de sus pupilos, José Manuel Ruiz.
Para Ramon Mampel, este era su segundo Mundial al frente de la selección española. En el de Pekín 2015 consiguió una medalla de oro por equipos en la clase 7. Ha tomado parte también en las dos últimas ediciones de los Juegos Paralímpicos. En Río de Janeiro 2016, sus palistas se colgaron dos medallas de plata (una individual y otra por equipos), mientras que en Londres 2012 consiguieron dos medallas de plata (una de ellas en la categoría individual) y una de bronce.
Aunque actualmente su principal trabajo lo desarrolla con los deportistas válidos, para el ex palista del Epic Casino del Comerç, poder entrenar y llevar a Mundiales y Juegos Paralímpicos a este talentoso grupo de deportistas discapacitados es uno de los aspectos del trabajo de entrenador que más gratificante le resulta. Y, desde hace años, los resultados le avalan.
