Santiago Sabatés es socio fundador y CEO de Eurofragance, multinacional catalana del sector de fragancias de perfume y líder a nivel nacional que tiene su sede central en Sant Cugat del Vallès y una planta productiva en Rubí. Se trata de un emprendedor paradigmático que en 1990, con 25 años y 3.000 euros, decidió comenzar su propio proyecto empresarial en una pequeña nave en Terrassa en el campo de los aromas y las fragancias. Era un sector que había vivido muy directamente en su infancia de la mano de su padre, profesional en una empresa del ramo, que le supo inculcar la pasión por el mundo de los olores.
Así es como se inició la aventura perfumística de Eurofragance, una empresa que a pesar de partir de nada y tener que luchar en sus inicios con intensidad para levantar el negocio (intereses altos, mercado interior estacado, impagos, crisis post olímpica …) nació ya con vocación internacional y con el objetivo de abrirse al mundo.
Sabatés compartió, recientemente, con los miembros del pleno de la Cambra de Terrassa las tres etapas clave del crecimiento de Eurofragance (desde hace unos meses el pleno de la cámara local se desarrolla bajo una nueva dinámica en la que incorpora la visita de personas de referencia en el ámbito empresarial). Según Sabatés, la primera, entre los años 1993 y 2009, fue una etapa exportadora con mucho éxito en la que la empresa siguió un "proceso de expansión típico y tópico de la empresa familiar catalana para crear el efecto de mancha de aceite". La culminación de la etapa exportadora les llevó a alcanzar, según afirmó Santiago Sabatés, "hasta el 87% de ventas fuera de la Unión Europea" logrando así un "posicionamiento internacional incuestionable y una reputación en los mercados" (especialmente en el exigente mercado de Oriente Medio) a los que servían desde su planta de Rubí desde el año 1995.
Etapa tradicional
La primera etapa tradicional de visita, venta, pedido, fabricar y servir inflexiona cuando se traza el plan estratégico 2009-2014 y se inicia la segunda etapa en la que Eurofragance se convierte en una empresa internacional, como consecuencia de la apertura de un proceso de expansión exterior y la venta de la división de aromas (aplicada al sector alimentario) para concentrarse en el negocio de las fragancias. Abrieron una oficina en México (actualmente ya es una planta productiva con 45 personas), dieron cobertura al mercado de Oriente Medio desde un centro creativo y de desarrollo en Dubai que cuenta con 30 personas, abrieron una oficina de ventas en Turquía (actualmente tiene unas expectativas de crecimiento importante) y culminaron este proceso de expansión estableciendo un centro creativo (16 trabajadores) y de fabricación ( 25 empleados) en Singapur para dar cobertura al Sudeste asiático. Eurofragance inició en el año 2014 la tercera etapa que ha permitido a la empresa consolidarse como una multinacional profesionalizada totalmente, con la incorporación de profesionales séniors y en crecimiento a través del aprovechamiento de nichos de mercado diversificando tanto a nivel geográfico como a nivel de segmentos de producto para una buena cobertura de necesidades en el campo de las fragancias.
Facturación
Actualmente, Eurofragance ha alcanzado prácticamente el umbral de los 80 millones de euros de facturación a través de un crecimiento orgánico, una expansión internacional consolidada y un alto nivel de profesionalización; y fija su objetivo en 120 millones de euros para el 2020 con el reto de entrar en mercados complejos como Brasil, Estados Unidos o India, donde prevén un crecimiento a través de la adquisición de compañías más pequeñas del sector.
El socio fundador y CEO de Eurofragance afirmó que "los clientes nos ven muy globales gracias a los 280 empleados de 34 nacionalidades que forman un gran equipo que se mueve en una complejidad organizativa significativa porque, a pesar de ser una empresa mediana, es una multinacional en la que conviven personas de todo el mundo, se hablan muchos idiomas y coexisten diferentes visiones que le aportan una patina muy interesante." Por ello, la empresa tiene una política de recursos humanos orientada a la fidelización y crecimiento de sus profesionales, combinando especialmente la experiencia de los séniors con el entusiasmo de los juniors, lo que Sabatés destacó como una combinación intergeneracional y multicultural positiva. Eurofragance es una empresa que se sabe readaptar, evolucionar y ser disruptiva. Esto hace que sea percibida como una "empresa joven, viva, siempre reinventándose", concluyó Sabatés.