El paso de los años le ha sentado bien a Sense Sal. Por un lado no sólo han acumulado conciertos y experiencias, sino que han ido perfeccionando una voz propia, marca de la casa, que convierte sus conciertos en una cita festiva y en un soplo de aire fresco a partes iguales.
En el que se apuntaba como el último concierto de la historia de Faktoria d’Arts (al menos sí era el del cierre de una etapa), el grupo buscó ser generoso con su público. Primero, prepararon a conciencia su nuevo directo y dejaron poco margen a los errores o a la improvisación. Ensayaron incluso las coreografías. Y prepararon un largo repertorio sin apenas parones que sumó más de una veintena larga de canciones.
En segundo lugar, hicieron algo aproximado a dejarse la piel, y supieron manejarse con cohesión en el escenario, tal como muestran también en su cuarto disco.
"És aquesta nit", una canción paradigmática de su nuevo trabajo -"Només tenim la veu"- y también una de las más contagiosas, abrió un concierto en el que se llenó la mitad de la sala de aficionados al grupo. Con el público entregado y la banda con evidentes ganas de compartir con su audiencia sus nuevas canciones, y también sus versiones de emblemáticos temas de sus discos anteriores -incluido su hit "Tinc un nou pla"- desarrollaron casi sin respiro piezas con un omnipresente aroma pop y unas bases asentadas en la fusión.
El principal objetivo de la banda fue hacer bailar, divertir, contagiar de la positividad y el optimismo con canciones que dicen mucho de la juventud de los Sense Sal y de buena parte de su audiencia.
Positividad y optimismo
Se prepararon también algunas sorpresas, como la presencia de Carlos Sadness en el escenario para acompañarles con el mismo tema en el que les acompaña en el disco, "Fins que surti el sol", o la explosión de serpentinas del principio que anticipó la fiesta en que la banda quería convertir la sala a lolargo de su actuación. Y lo logró, no sólo con la idiosincrasia de sus canciones sino con su entrega, con una puesta en escena en la que no descuidaron la calidad musical. Acentuaron su trabajo en las armonías vocales, la riqueza de su instrumentación, y potenciaron a sus carismáticos cantantes, Nasi Cabanes y Alícia Rey, responsables en paralelo de alimentar el feedback con el público.
Por lo demás, subrayaron en directo lo distinta que es una de sus nuevas canciones, "La vall", del resto. Curiosamente parece ser que ésta es una de las que más atrae a los oyentes de su nuevo disco.
Sense Sal ha abierto de esta manera una gira de presentación de la que aún no han desvelado fechas (a excepción de su presencia en el festival Clownia) que les llevará a protagonizar entre veinte y treinta conciertos.
SENSE SAL
Nasi Cabanes (guitarra y voz), Alícia Rey (guitarra y voz), Ana Moya (violín), Albert Bach (batería), Cristina Martínez (teclados), Salva Cañadell (bajo), Marta Peralta (trombón) y Pep Tormos (trompeta.) Sábado, 6 de mayo. Faktoria d’Arts.