La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Neus Munté, ha considerado hoy que “no tendría sentido” una investigación de la Fiscalía por la compra de urnas porque el Ejecutivo actúa dentro del “marco de la legalidad”, y ha avisado de que no aceptarán “amenazas ni intimidaciones” del Gobierno del PP.
La Fiscalía ya prepara una querella ante la licitación por parte de la Generalitat, por valor de 200.000 euros, del suministro de urnas para “las elecciones al Parlamento de Cataluña, consultas populares y otras formas de participación ciudadana”, con las que pretende celebrar un referéndum soberanista después del verano.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del ejecutivo catalán, Munté ha subrayado que “no tendría ningún sentido” que la Fiscalía iniciara finalmente actuaciones formales porque les “ampara la ley” y “no hay ninguna normativa que impida la compra de urnas”.
La consellera ha afirmado que “a nadie le debería extrañar”, así, que el Govern ejerza “con toda la normalidad las competencias” de la Generalitat para comprar urnas, con el “compromiso inequívoco en la celebración del referéndum”, y ha avisado, asimismo, de que se niega a “aceptar las amenazas e intimidaciones del Gobierno del PP”.
Así se ha referido al aviso del pasado viernes del portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, quien avanzó que la Fiscalía actuaría si se materializaba el inicio del acuerdo marco para la compra de urnas, lo que ya ha sucedido hoy.
Sin embargo, “lo que está haciendo el Govern no es en absoluto ilegal”, ha esgrimido la consellera, alegando que la Generalitat tiene competencias para adquirir receptáculos, de manera que el Ejecutivo catalán “trabaja con plena normalidad en el marco de sus competencias y obligaciones”.
Aunque la portavoz tampoco ha rehuido reiterar el compromiso del Govern con el referéndum: “Se trata de un acuerdo marco para adquirir urnas, la democracia necesita urnas, este país necesita urnas y el compromiso del Govern con el referéndum es total; se necesitan urnas para diferentes procesos y momentos, y necesitamos poder votar también en un referéndum”.
Munté ha garantizado que el Govern defenderá “la libertad” de las empresas potencialmente proveedoras de urnas para que puedan trabajar con normalidad y ha subrayado que “el problema está en quien las amenaza”.
La consellera no ha querido comentar un posible escenario en el que no se puedan comprar las urnas como consecuencia de la actuación judicial y ha subrayado que el Govern no tiene “planes A o B”, sino “un plan que se llama referéndum”, al tiempo que ha aseverado: “Tendremos urnas”.
Munté no ha concretado quién firmará la compra de las urnas, aunque el proceso de licitación lo lleva a cabo el Departamento de Gobernación, dirigido por Meritxell Borràs (PDeCAT).
A partir de la publicación del concurso, se abre un periodo de 15 días para que se presenten empresas candidatas a ser homologadas como proveedoras de urnas en caso de que éstas sean requeridas por el Govern.
Munté no ha realizado ningún anuncio sobre el calendario del referéndum pero ha garantizado que no se convocará “de un día para otro”, sino de acuerdo con los plazos que fijan “los marcos legales establecidos”.