El expresidente del Consell Comarcal del Vallès Occidental, Antonio Rebolleda, y el ex gerente de la institución, Américo Ologaray, han sido absueltos por el juzgado penal 3 de Terrassa de los delitos de prevaricación y nombramiento ilegal para cargo público del ex director de Mercavallès, Jose Manuel Piedrafita, que también ha sido exculpado como cooperador necesario.
El juicio se celebró el pasado 10 de abril a raíz de la denuncia presentada por el propietario del bar de Marcavallès, Antonio Ramírez, que acusaba a la ex cúpula del Consell Comarcal entre 2007 y 2009 de haber nombrado a dedo y sin mediar concurso público al director del mercado central.
La sentencia considera prescrito el delito de nombramiento ilegal puesto que éste se produjo en abril de 2009 y la denuncia se interpuso en 2014, superado el plazo de prescripción de 3 años. Por la misma razón Jose Manuel Piedrafita queda exonerado del delito de aceptación de nombramiento ilegal.
Por lo que respecta al delito de prevaricación, la juez estima que "no se ha practicado ninguna prueba que demuestre la existencia de una previa relación entre los acusados" y Piedrafita que llevase a los primeros a favorecerle, aunque reconoce que tanto el presidente como el gerente sabían que no cumplía los requisitos para el cargo. La magistrada toma en consideración las discrepancias que Rebolleda dijo haber tenido con Piedrafita en el Ayuntamiento de Sabadell y la afirmación de que "en absoluto era su candidato".
El ex presidente dijo en el juicio, y así reza en la sentencia, que fueron "las estructuras del partido( en alusión al PSC) las que eligieron a Piedrafita", mientras el gerente Ologaray reiteraba que el nombramiento "venía impuesto por la superioridad". La urgencia con que se cerró el contrato la ha asumido la técnica de recursos humanos, que admitió haber dado de alta al director de Mercavallès en la Seguridad Social antes de su nombramiento "porque era el procedimiento que se seguía ordinariamente".
La sentencia, contra la que cabe recurso, concluye que "no solo no se ha practicado ninguna prueba que acredite que Antonio Rebolleda, Américo Ologaray y Jose Manuel Piedrafita hubieren tomado la decisión de que éste último fuese nombrado presidente de Mercavallès, aunque no tuviese la categoría requerida para el cargo, de forma urgente y omitiendo cualquier convocatoria pública, voluntad necesaria para la concurrencia del elemento subjetivo del delito objeto de acusación, sino que además resulta dudosa la concurrencia de ilegalidad patente, evidente y clamorosa, a la vista de la prueba practicada".