La UGT del Vallès Occidental presentó ayer en Terrassa la campaña "A igual trabajo, igual sueldo", que denuncia el "fraude" y la "explotación laboral" que representan las empresas multiservicios o de servicios integrales, según aseguró José Luis Fernández, secretario comarcal de la organización. UGT dio a conocer las conclusiones de un informe sobre la implantación de las empresas multiservicios en la Región Metropolitana de Barcelona (RMB) y, más concretamente en el Vallès Occidental, donde hay registradas 136 empresas de este tipo con 5.002 trabajadores.
Con ello, la comarca sólo se ve superada por Barcelona ciudad en número de empresas y empleados en este tipo de compañías, y supera, en este capítulo, a las otras tres capitales de provincia catalanas juntas. Fernández remarcó que el número de trabajadores afectados en la comarca por estas empresas, que surgen a raíz de la reforma laboral de 2012, es prácticamente el mismo que los asalariados despedidos mediante ERE de extinción en ese periodo, concretamente 5.317. "No es una casualidad", dijo Fernández. "Se están eliminando puestos de trabajo con derechos por otros de pura superviviencia y todo ello al amparo de la legalidad".
Sin actividad principal
Las empresas multiservicios o de servicios integrales son aquellas que no tienen una actividad principal como tal y que prestan un amplio abanico de servicios auxiliares (limpieza, seguridad, mantenimiento, hostelería y transporte, etcétera) a terceras compañías. Este tipo de empresas se regulan mediante convenios propios con condiciones laborales y sueldos mínimos, evitando la aplicación de los convenios colectivos sectoriales. La contratación de empresas multiservicios supone para la empresa usuaria una reducción de costes, pero "empeorando y precarizando las condiciones laborales y salariales", dijo Fernández. Los trabajadores contratados a través de multiservicios pueden llegar a cobrar la mitad que un trabajador al que se le aplica el convenio sectorial correspondiente, y muchas veces incluso trabajando más horas.
José Luis Fernández volvió a criticar con dureza la reforma laboral impulsada por el PP, y aseguró que muchos trabajadores aceptan ser explotados por el simple hecho de mantener el trabajo. "Hay gente que se toma esta opción como una tabla de salvación porque es lo que le ofrecen", afirmó. Fernández exigió la derogación de la reforma laboral, el aumento de los inspectores para luchar contra el fraude en la contratación, que se elimine el CNAE que permite este tipo de empresas, y que desde la esfera política se "apueste por un acuerdo marco para regular la contratación en la empresa pública y que se incluyan "cláusulas sociales en las licitaciones para evitar que las empresas multiservicios puedan acceder". La miembro de la comisión de la permanente de la región metropolitana de Barcelona-UGT, Afra Blanco, aseguró que con la crisis muchas empresas han dejado de prestar servicios propios para contratar a empresas multiservicios.
Vivero de precariedad
José Luis Fernández dijo que, gracias a estas empresas, el Vallès Occidental se está convirtiendo en el "vivero de la precariedad laboral" en Catalunya. El fenómeno empezó en la "hostelería y la restauración que externabilizaban puntualmente algunos servicios. Pero las empresas han visto un gran negocio en estas prácticas, que se ha extendido como una mancha de aceite. Ahora ya están introducidas en la industrial y en la administración pública".
En este sentido, Óscar Ramos, secretario comarcal de UGT Fica, explicó que la actuación de las empresas multiservicios ya afecta gravemente a la industria. "La industria era un tejido consolidado con convenios propios pero ahora se está instalado una precariedad que, además, viene protegida por Ley. Las relaciones son cada vez más desiguales entre propietarios y trabajadores".
En la rueda de prensa, también se aseguró que este tipo de empresas contrata a personas con discapacidades físicas y psíquicas con un "coste cero, ya que reciben un 50% de subvención de la administración y no pagan cuotas a la Seguridad Social. Estos trabajadores están igualmente explotados", afirmó Manel Mañas, también de UGT.
