La morosidad del crédito concedido por las entidades financieras que operan en España -bancos, cajas, cooperativas de crédito y financieras- se mantuvo en enero en niveles cercanos a los registrados en mayo de 2012, y ello a pesar de repuntar en enero al 9,17 %, desde el 9,11 % de finales de 2016.
Este es el primer incremento que registra la tasa de morosidad del sector financiero desde el pasado mes de octubre, según los datos provisionales publicados hoy por el Banco de España.
No obstante, la tasa de morosidad se reduce si se tiene en cuenta el dato de enero de 2016, cuando situó en el 10,12 %.
Los citados datos hechos públicos hoy por el Banco de España ponen de manifiesto que en enero de 2017, los créditos impagados a bancos, cajas, cooperativas de crédito y financieras se redujeron hasta los 115.697 millones de euros, frente a los 116.281 millones de diciembre de 2016.
También bajó el volumen total del crédito o “stock” que bancos, cajas y cooperativas tenían concedido a familias y empresas instaladas en España en enero, hasta 1,261 billones de euros, desde los 1,276 billones del mes anterior.
Pese a estas reducciones, la morosidad ha subido tal y como ha recordado el portavoz de la Asociación Española de Banca (AEB), José Luis Martínez Campuzano, que ha explicado que esto se debe la caída en la evolución anual del saldo de crédito.
En este sentido, ha añadido que el menor saldo vivo de crédito contrasta con la aceleración de la nueva financiación a familias y pymes.
“Se sigue materializando tanto el desapalancamiento de deuda anterior de familias y empresas como la diversificación hacia la financiación mayorista por la gran empresa”, ha añadido Campuzano en una nota, en la que ha precisado que en un escenario de fuerte crecimiento económico y facilidad de financiación, especialmente desde la banca, “se dan las condiciones para un aumento del saldo vivo de crédito en un futuro próximo”.
“Mientras, seguirá el proceso de ajuste de la morosidad de los bancos”, ha concluido.
Los mismos datos del Banco de España también ponen de manifiesto que solo el sector de bancos, cajas y cooperativas -dato agregado y separado del de los establecimientos financieros de crédito (EFC)- la morosidad también subió en enero hasta el 9,24 %, desde el 9,18 % del mes previo.
Igualmente, dicha tasa se reduce si se tiene en cuenta el dato de hace un año (enero de 2016), cuando alcanzó el 10,19 %.
Los dudosos o impagados que acumularon estos tres tipos de entidades alcanzaron a cierre de enero de 2017, los 111.766 millones.
En cuanto a la cartera crediticia concedida a familias y empresas por estas entidades, en enero alcanzó 1,209 billones, frente a los 1,222 billones de diciembre de 2016.
Por último, los establecimientos financieros de crédito (EFC), que se dedican a la financiación de grandes bienes de consumo, registraron en enero una tasa de morosidad del 5,99 %, la misma que al cierre de 2016, y con lo que se mantiene en sus nivel más bajo desde noviembre de 2008.
El Banco de España también ha publicado hoy el dato de morosidad de los créditos para la compra de una vivienda correspondientes a cierre de 2016, cuando acabó en el 4,73 %, por debajo del 4,85 % que marcó un año antes.
De la misma manera, la tasa de morosidad registrada por el sector promotor e inmobiliario cayó de forma más notable, al 25,50 %, desde el 27,54 % previo.