La compraventa de pisos vive un nuevo renacer. Las operaciones se dispararon a lo largo del año pasado, el mejor ejercicio desde 2007. Durante 2016 se vendieron un total de 2.427 viviendas en Terrassa, lo que significa un crecimiento del 30,5% respecto al año anterior.
La estadística sobre transacciones inmobiliarias recopilada por el Ministerio de Fomento a partir de los datos de los colegios de notarios revela una intensa actividad en el mercado inmobiliario. Según estos datos, a lo largo de 2016 se vendieron en la ciudad 2.427 inmuebles, lo que representa un incremento del 30,5% respecto a 2015, cuando se formalizaron 1.860 ventas.
La cifra de ventas del año pasado es la más elevada desde 2007, cuando se produjeron 3.807 operaciones. Ese fue el año en el que estalló la burbuja inmobiliaria y su onda expansiva supuso el inicio de la crisis económica que ha arrasado con el bienestar de miles de familias en la ciudad. Los tres años siguientes las cifras de ventas se estabilizaron en torno a las dos mil transacciones y han estado por debajo desde el año 2011 hasta 2015. Fue el año pasado cuando la recuperación eclosionó y se registró un olvidado dinamismo en el mercado.
El intenso movimiento del mercado local va en sintonía con el dinamismo que también registraron localidades de similares características a Terrassa. Por ejemplo, Santa Coloma de Gramenet, con un aumento del 33,5% en las ventas, o Sabadell, con un 31,6%, están entre las localidades españolas donde más crecieron las ventas.
Todos los periodos del año funcionaron bien, pero fueron el segundo y último trimestre (con 705 y 692 compraventas, respectivamente) los que mejores datos absolutos y mayor incremento porcentual aportaron.
Obra nueva, residual
Por tipología de viviendas, la mayor actividad se registró en el mercado de segunda mano. Cabe recordar que Fomento considera una vivienda usada aquella que tiene más de dos años de antigüedad una vez obtenida la licencia de primera ocupación que acredita que la obra está acabada y los pisos, listos parar ser puestos en venta. De las 2.427 ventas que hubo el año pasado, el 91,2% correspondieron a viviendas usadas; concretamente, 2.213 pisos.
En el actual contexto, prácticamente ha desaparecido la vivienda protegida. El año pasado solamente hubo 29 ventas de pisos de protección oficial, lo que apenas representa un 1,2% de todas las operaciones registradas. En un escenario de descenso de precios, los compradores se interesan, casi de forma exclusiva, por los inmuebles de renta libre.
EL DATO
91,2%. Es el porcentaje que representan las ventas que hubo el año pasado en el mercado de segunda mano.