Mercadona rebajará su beneficio al nivel de los 200 millones en 2017 y 2018, un tercio de lo que ganó en 2016 (636 millones), para invertir este año el récord de entre 1.000 y 1.200 millones de euros con el objetivo avanzar en su apuesta por los frescos y en hacer “rentable” la venta a través de internet.
“Ganar 200 millones no es dar un paso atrás, es dar un paso adelante que nos dará una velocidad de crucero alucinante. Con la reducción del beneficio vemos que en el futuro ganaremos más dinero y consolidaremos mucho más la empresa”, ha afirmado hoy su presidente, Juan Roig, quien ha reiterado que no piensa en jubilarse.
Lo principal es tener contentos al “jefe” -cliente-, a los trabajadores y a los proveedores. “Si pones arriba del todo el beneficio es muy difícil tomar determinadas decisiones”, ha defendido Roig, quien ha asegurado que si la compañía mira a largo plazo tendrá “grandísimas ventas y grandísimos beneficios” en el futuro.
La cadena de supermercados cerró el ejercicio 2016 con un beneficio de 636 millones de euros, el 4 % más que en 2015, un incremento de las ventas del 3,9 %, hasta 19.802 millones, y la creación de 4.000 empleos, que elevan el total de la plantilla a 79.000 trabajadores.
A lo largo del año, Mercadona invirtió 685 millones de euros, inauguró 50 supermercados, para sumar un total de 1.614 tiendas, y reformó otros 35.
El grupo seguirá centrado en mejorar la calidad de sus productos y de su oferta en frescos, en especial en las categorías de “horno, charcutería y carnicería”, después de haber mejorado ya en pescadería y en fruta y verdura.
Los frescos necesitan “mucha gente” y muy formada, “vamos a poner toda la gente que haga falta y luego vendrán los resultados”, ha insistido Roig, quien ha señalado que crearán entre 2.000 y 4.000 empleos en 2017 en función de cómo evolucione la apuesta por el comercio “online” de Mercadona, que ahora aporta el 1 % del total de sus ventas.
El objetivo en comercio electrónico, con el que ahora pierden unos 30 millones de euros al año, es ser rentables, ha aseverado Roig, quien ha avanzado que ya saben cómo hacerlo y que ahora su trabajo es demostrarlo.
“Nuestra página web es una mierda”, ha reconocido Roig, quien ha asegurado que no le preocupa la aparición de competidores como Amazon, sino Mercadona, y ha augurado que en 2018 podrían sorprender al resto de operadores porque están dándole vueltas a la idea de “hacer muy bien” la venta a través de internet.
Mercadona “online” supondrá un incremento de plantilla importante, ha subrayado Roig, quien ha descartado la introducción de nuevas líneas de negocio porque a lo que se dedican es a “llenar el estómago del jefe, lavarle la casa y la belleza personal”
En 2017, Mercadona abrirá 30 establecimientos y reformará otros 126 con el objetivo de adaptarlos a su nuevo modelo de tienda, en la que los frescos ganan espacio.
La cadena mantiene su intención de abrir sus primeras tiendas en el exterior (cuatro) en Portugal en 2019.
Mercadona, que entre 2012 y 2014 mantuvo congelada su plantilla en unas 74.000 personas, creó mil empleos en 2015 y elevó hasta los 4.000 los generados en 2016, un repunte que Roig ha atribuido a la apuesta por los alimentos frescos, que requiere “mucha gente”.
“Estamos muy orgullosos porque generar empleo es contribuir al desarrollo de España”, ha subrayado Roig, quien ha defendido los sueldos que paga Mercadona, que para este año prevé una subida salarial del 1,6 %.
“Yo soy uno de los más ricos de España”, pero es un orgullo decir que nuestros trabajadores “son de los más ricos de España”, ha afirmado Roig, quien ha defendido que cualquier cajera que lleve 3 o 4 años en la compañía y haya superado el examen de evaluación cobra 1.700 euros netos (1.450 euros al mes más una prima de dos mensualidades).
La compañía pagó 250 millones de euros en impuestos de sociedades y tributos locales, así como casi 580 en Seguridad Social, ha explicado Roig, quien ha asegurado que Mercadona paga lo que debe -lo que marca la ley- y ha subrayado que los que más tienen son los que más tienen que pagar.
