Entre los muchos elogios que ha recibido Jabier Muguruza a lo largo de su trayectoria, es quizá una frase bastante reciente de David Morán la que más se aproxima al sentir general de mucha de la prensa especializada, calificando al cantautor vasco como “un inmenso hacedor de pequeñas canciones que se acaban volviendo enormes.”
“Tonetti Anaiak”, su decimocuarto álbum desde que iniciara su andadura como cantautor allá por los 90, confirma que su inspiración sigue intacta, no sólo como compositor, sino también como letrista. Esta labor la comparte (como acostumbra a ocurrir en todos sus discos) con otros autores como Lourdes Oñederra, Harkaitz Cano y Gerardo Markuleta.
El músico regresa mañana a la Nova Jazz Cava, y ésta va a ser su tercera vez. Lo hará en el marco de la programación del festival Barnasants, un evento musical al que suele acudir año tras año.
Sin ir más lejos, el año pasado ya estuvo presentando este trabajo en Jamboree, en el marco del mismo festival, justo después de haber grabado un disco en directo en el propio Barnasants (fruto de su premio al mejor directo, del año anterior.) “Tonetti Anaiak” es ya un disco rodado, y sus nueve canciones conviven en el actual directo del artista.
El pianista Txus Aranburu acompañará mañana a Muguruza a la hora de recrear un disco que, lejos de lo que se ha dicho en varios artículos de prensa, no es ni un homenaje al circo ni a los payasos Tonetti. Sí hay, sin embargo, una canción que da título al trabajo y que parte de “una anécdota de infancia”, explica Muguruza en una entrevista con este diario. Fue una visita que hizo a los Tonetti al Circo Atlas junto a su padre, cuando tenía “11 o 12 años.” La foto de aquel día ilustra la portada del trabajo. “Antes, cuando llegaba el circo a tu pueblo, no tenía nada que ver con ahora. Era un acontecimiento social y estábamos todos muy contentos. A los hermanos Tonetti les conocía mi padre, nunca llegué a preguntarle el por qué, y yo cuento que estuvimos con ellos, en la rulot, en un ambiente muy agradable. Al cabo de unos años me enteré de que el Cara blanca se suicidó, y eso me extrañó, por decir una palabra suave. En la canción cuento que gracias a “Emak Bakia”, una película que te recomiendo, supe que un payaso no muere nunca, algo que ya decía Fellini. El niño que llevo dentro se ha tranquilizado.”
Emociones
Es éste, de nuevo, un disco lleno de emociones, con muchas canciones que expresan reflexiones variadas, de un autor que considera Catalunya como su “segunda tierra sin ninguna duda”, y de la que guarda muy buenos recuerdos: “Abrir el Festival Grec, actuar en la reapertura de la Cova del Drac junto a Charlie Watts, grabar tres discos en el Auditori de El Vendrell, son tantas cosas… Actuar en el Barnasants ya es sentirse como en casa.”.
LA CITA
Lugar Nova Jazz Cava
Hora Mañana, a las 8 de la tarde
Precio 12 € y 15 € (taquilla)