Las posibilidades de un pacto de gobierno entre PSC y TeC se cerraron definitivamente (o por ahora) el pasado 31 de diciembre, cuando la ejecutiva socialista rechazó romper con el PDeCAT y aliarse con los comunes. Tras este portazo público, no ha habido ningún encuentro entre ambas formaciones para comunicar tal decisión. Así lo ha confirmado esta semana Xavier Matilla, líder de TeC, quien se mostró "decepcionado" porque los socialistas "en lugar de cambiar, han preferido continuar con su manera de hacer, con sus vicios, y han decidido hacerlo junto a un partido como el PDeCAT, con la historia que tiene en Catalunya y, particularmente, en Terrassa, donde cuenta con personajes como Miquel Sàmper".
La apuesta por la gestión pública del agua llevó a TeC a "pensar que el PSC tenía voluntad de cambiar, de romper con su historia". Pero, "lamentablemente no ha sido así", señaló Matilla. La decepción del líder de los comunes es mayor puesto que el PSC "no sólo ha decidido que no quiere sumar junto a un proyecto nuevo", sino que "no se ve un escenario de cambio en las políticas de ciudad", más allá del servicio del agua. El concejal se refirió a políticas educativas, culturales o urbanísticas, en las que "no hay ninguna idea sobre hacia dónde queremos avanzar". El edil criticó que los socialistas prefieran "el confort" del pacto actual con el PDeCAT a construir una "alternativa" junto a TeC.