El fiscal del caso de corrupción en el que está implicado el cuñado de Felipe VI, Iñaki Urdangarin, anunció hoy que pedirá al Tribunal Supremo que le aumente la condena, que en primera instancia fue de seis años y tres meses de prisión.
Un tribunal de Palma de Mallorca (islas Baleares) dejó ayer en libertad provisional sin fianza a Urdangarin, a la espera de que el Supremo revise la causa en la que el cuñado del rey de España fue condenado por prevaricación continuada, falsedad, malversación de fondos públicos, fraude, tráfico de influencias y dos delitos contra el fisco.
El fiscal Pedro Horrach había solicitado cárcel provisional eludible con 200.000 euros a Urdangarin, petición que fue rechazada por las tres magistradas del tribunal.
Hoy, en declaraciones a la emisora Cadena SER aseguró que propondrá a los fiscales del Tribunal Supremo que recurran la sentencia y pidan endurecer la pena de cárcel para Urdangarin y su socio, Diego Torres, éste último condenado a ocho años y seis meses.
Ambos son los principales condenados en el “caso Nóos”, relacionado con el supuesto desvío, entre 2003 y 2006, de unos 6.360.000 dólares procedentes de fondos públicos al Instituto Nóos, entidad sin ánimo de lucro que presidió Urdangarin.
El fiscal entiende que el tribunal no ha considerado todos los delitos de malversación y fraude en documento público que él había justificado.
Sobre la libertad provisional para Urdangarin, que reside en Suiza y tendrá que acudir el primer día de cada mes a un control, el fiscal Horrach admitió que, pese a su petición de cárcel, le parece “razonable” si no existe riesgo de fuga y no le parece una “situación de privilegio”.